RE: 🇻🇪 PARTE 122: Daré hasta 2 dólares a todos los que comenten su comprensión sobre el video. Para apoyar a la gente especialmente en países de habla hispana como Venezuela, Bolivia, Guyana, Paraguay, Ecuador y Perú ...🇻🇪
La palabra celos, significa ser o estar envidiosos de alguien que posee algo que nosotros no tenemos. Esta clase de celos es un pecado y no es característica de un cristiano, la persona celosa es controlada por sus propios deseos (1 Corintios 3:3). Gálatas 5:26 dice, “No nos hagamos vanagloriosos, irritándonos unos a otros, envidiándonos unos a otros.”
Una de las causas más comunes de separación de las uniones en la pareja son los celos, los que explotan tanto porque el celoso no disminuye o reconoce su exceso, como porque la pareja decide aceptarlos.
Algunas personas dicen los celos son un componente sinequanon de la relación de pareja o manifestación del amor. Sin embargo, los problemas que origina esta situación pueden volver la relación insostenible causando la separación.
Si bien es cierto que existen celos normales –causados por el descubrimiento de cierto coqueteo o interés por alguien que se encuentre fuera de la relación de la pareja, estos pueden ser resueltos si ambos acuerdan no transitar por el campo de la seducción. Pero hay otro tipo de celos que es el enfermizo.
La Biblia nos dice que debemos tener la perfecta clase de amor que Dios tiene por nosotros. “El amor es sufrido, es benigno; el amor no tiene envidia, el amor no es jactancioso, no se envanece; no es indecoroso, no busca lo suyo, no se irrita, no guarda rencor.” (1 Corintios 13:4-5).
Entre más nos concentremos en nosotros mismos y nuestros deseos, seremos menos capaces de concentrarnos en Dios. Cuando endurecemos nuestros corazones a la verdad, no podemos volvernos a Jesús y permitirle que nos sane (Mateo 13:15). Pero cuando permitimos que el Espíritu Santo nos controle, Él producirá en nosotros el fruto de nuestra salvación, el cual es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe, mansedumbre y templanza (Gálatas 5:22-23). Santiago 3:14-15 dice, “Pero si tenéis celos amargos y contención en vuestro corazón, no os jactéis ni mintáis contra la verdad, porque esta sabiduría no es la que desciende de lo alto, sino terrenal, animal, diabólica.”
El estar celosos indica que no estamos satisfechos con lo que Dios nos ha dado. La Biblia nos dice que estemos contentos con lo que tenemos, porque Dios nunca nos desamparará ni nos dejará. (Hebreos 13:5). A fin de combatir esto, necesitamos hacernos más como Jesús y menos como nosotros mismos. Podemos hacer esto, estableciendo una relación personal con Dios.