Mi amor te estaba matando

Hoy me he enterado de dos cosas, de que mi amor te estaba matando y que ya no soy yo la que comparte tu copa.

Es difícil para mí decirlo así, que no puedo dormir porque la garganta me tiembla y lloro hasta pensar que puedo reír. Escribo esto con mi corazón a medio partir, y con las ganas vivitas de morir. Me pregunto como fue que cambió tanto tu vida en tan solo un mes sin mi, que no te inmutas de ver como mi voz se tambalea cuando te veo venir.

Hoy es tu cumpleaños, que bueno que existes, lo malo es que compartes tu vida con alguien que apenas conociste. Sé de carreras que hoy no voy a poder dormir, y me maldigo a mi misma por haber dejado el cigarro y no fumarte hasta morir. Tus balas en forma de palabras, ¿esas son tus nuevas enseñanzas? Hacerme mierda la garganta de tanto gritar por tu aroranza.

Te he visto con tu nueva persona y no puedo evitar romperme, parece que se te ve muy bien y me dijiste sin corazón que ya no querías verme, y que las historias del pasado no eran razón para estremecerse. Me encuentro sentada llorando maldiciéndote muchas veces, no puedo creer que mi amor por ti duela tanto a tal punto de escocerme.

Mi amor te estaba matando, te era muy dañino, y yo que pensaba que de mis ojos solo podía emanar cariño. Mi amor te hacía daño y por eso escapaste, no te detuviste en pensar siquiera lo que detrás dejaste. Mi amor te estaba dañando, ¿en serio era tan grotesco? ¿Aún cuando ponía mi cuerpo en peligro para salvar tu aliento?

Lo arrecho es que después de tanto tiempo le conté a mi mamá lo mucho que te estaba queriendo. Lo arrecho es que te pienso todo el día y pierdo el tiempo imaginando que me piensas todavía. Lo arrecho es que después de tanto tiempo me puedes decir hola y te recibiré con flores y miles de testamentos.

Esto es arrecho, amar a destiempo, amar tan fuerte que te duele el pecho y amar a tal punto de sentir que te estás muriendo.