Los niños se estresan - Y porqué debería importarte

El desarrollo psico-cognitivo del individuo tiene su fase fundamental en la edad temprana, cuando este empieza a formar las estructuras físicas cerebrales y bases sinápticas para futuros desarrollos de estructuras de pensamientos más complejas.

Sin embargo, ¿qué pasa si hay factores fuertes de stress en la niñez?, la ciencia nos explica con un estudio que toda persona debería leer.

Tiempo de Lectura 8-10 minutos

Contenido

• Algunas consecuencias relacionadas
• El origen
• Nuestro entendimiento del mundo
• El estudio
• El resultado
• La solución
• Porqué debería importante
• Fuentes

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Los seres humanos somos particularmente complejos; la teoría de las múltiples inteligencias ha definido más de 5 tipos de inteligencia (junto con todas las ramificaciones sinápticas que esto implica) las cuales podemos usar de manera conjunta para tener noción y captar nuestra realidad de una manera más eficiente (desde el punto de vista evolutivo).

El desarrollo de cada una de nuestras capacidades cognitivas dependerá en gran medida de nuestro entorno y de nuestras oportunidades; el desarrollo psico-cognitivo de un niño puede verse afectado por una miríada de factores que influenciarán, ya sea de manera positiva o negativa, el desarrollo del mismo.

Uno de estos factores, muchas veces pasado por alto o dado por sentado, caracterizado por privaciones extremas o maltratos en la niñez es el stress que pueden sufrir los niños en su etapa de crecimiento.

Algunas consecuencias relacionadas

Estudios anteriores han determinado que el abuso y abandono en un niño puede tener consecuencias negativas en su desenvolvimiento emotivo, volviendo a estos individuos más propensos a sufrir por la incapacidad de controlar las emociones, aislamiento social o desarrollar múltiples desórdenes psicológicos como ansiedad y depresión.

Estas consecuencias, sin embargo, no se harán aparentes sino hasta entrada la adolescencia o la adultez.

El origen

El hecho de que estas consecuencias no se hagan aparentes a temprana edad indica que ciertas estructuras psicológicas fundamentales no se formaron de manera adecuada en la niñez, y esto tuvo ramificaciones más adelante en el desarrollo social del individuo, como la incapacidad de controlar emociones o expresarlas.

Sin embargo, no sólo los problemas de control emotivo deben tenerse en cuenta; hay otro problema particularmente grave que puede afectar no sólo nuestro desenvolvimiento social, sino que podrían cambiar nuestro enfoque y nuestra capacidad de adaptarnos al cambio (algo desde el punto de vista evolutivo sumamente importante).

Nuestro entendimiento del mundo

Usualmente, cuando realizamos una asociación, esta primera asociación se vuelve fuerte e indeleble: los conceptos no suelen cambiar de una manera constante (nubes de tormenta señalaran lluvia, la luz roja del semáforo indicará que no debemos pasar). A este tipo de aprendizaje se le llama aprendizaje instrumental.

Sin embargo, cuando nos encontramos en situaciones sociales, las cosas son un poco más complejas.

Cuando una persona deja de actuar de cierta manera en respuesta a nuestras acciones, el reconocer este cambio depende de nuestra "flexibilidad cognitiva"; gracias a esta flexibilidad, nuestra capacidad de relacionarnos con otros individuos se vuelve mucho más eficiente.

Y como vivimos en un mundo constantemente cambiante, esta capacidad no sólo se aplicará a nuestra manera de relacionarnos con la gente; reconocer las facetas cambiantes del mundo es una necesidad de cada individuo.

El estudio

Para comprobar que el stress en nuestra niñez afecta de manera adversa nuestra flexibilidad cognitiva, se llevó a cabo un estudio psicológico para medir esta capacidad en personas que sufrieron grandes cantidades de stress durante su desarrollo temprano y se les sometió a una prueba individual para medir su capacidad de re-asociación y cambio conceptual.

1. Se seleccionó a un grupo de adolescentes cuyos cuidadores abusaron físicamente de ellos durante su niñez.
2. Se les presentó con una prueba computarizada, donde se les mostraría una serie de imágenes y dos acciones pertinentes; presionar un botón o no hacer nada.
   1. En caso de presionar el botón, podrían ganar (refuerzo positivo o premio) O perder (refuerzo negativo o castigo) 100 puntos.
   2. En caso de no presionarlo, nada sucedería.
3. Luego de un tiempo, los resultados de ciertas de las imágenes serían invertidos (si presionabas el botón en una imagen que te solía dar puntos, te los quitaría, y viceversa).

Los resultados fueron contundentes: los adolescentes que tuvieron una infancia difícil lograron entre un 10% y 20% menos de flexibilidad cognitiva (capacidad de re-adaptación conceptual) que los adolescentes del grupo de control.

Además de esto, mientras la prueba tenía lugar, se escaneó la actividad de varias regiones del cerebro, y se descubrió algo interesante: las regiones putamen y cortex singulado anterior (dos regiones que ayudan a las personas con las asociaciones entre causa y efecto) estaban menos activas, y mostraron patrones similares a las personas con depresión.

El resultado

Este estudio indica que los individuos que han sufrido estrés con anterioridad tienen dificultades creando asociaciones esfuerzo-recompensa, lo que podría resultar en que el individuo encuentre menos experiencias positivas y más experiencias negativas al no poder asociar de manera apropiada el esfuerzo realizado con una recompensa obtenida.

Esto podría llevarle a no hacer nuevos amigos o no cumplir con hacer bien su tarea, creando refuerzos y creencias negativas, y eventualmente llevándolo a un riesgo mayor de problemas de salud mental como la depresión y ansiedad.

La solución

¿Cuál es la solución?, aunque la verdadera solución debería ser el no exponer a estos niños a situaciones de stress en primer lugar, la flexibilidad cognitiva puede ser entrenada para ayudar a estos niños a lidiar con esta "rigidez cognitiva" y darles una segunda oportunidad.

Por ejemplo, videojuegos diseñados cuidadosamente para enseñar a los niños a prestar atención a las recompensas de su entorno, o programas sociales donde se les exponga a nuevos ambientes y nuevas personas, podrían elevar su capacidad de mejorar los resultados sociales y de salud mental, al llevarles a adaptarse de manera eficiente a nuevas situaciones y personas.

Porqué debería importarte

Si vives en Latinoamérica, es bastante posible que te hayas encontrado con este tipo de situación: el maltrato a la niñez es una práctica retrógrada que se sigue auto-perpetuando por sus resultados (al ser capaz de destruir una vida desde los inicios, el ciclo se repetirá una vez más cuando un padre incompetente deba criar una vez más a sus hijos) y por la ignorancia que existe al respecto de una maneara extendida y socialmente aceptada con respecto a sus resultados, en especial en países sub-desarrollados y desarrollados.

Si vives en una región un poco más avanzada socialmente, es posible que estos casos sean menos comunes; sin embargo, existirán.

De cualquier manera, el entender los resultados del maltrato infantil, visto desde este punto de vista, te dará un nuevo enfoque respecto a las dificultades de adolescentes al adaptarse a nuevos entornos, o por qué podría llegar a resultarte difícil adaptarte y conseguir resultados eficientes en tu carrera o en tu vida, si tuviste una niñez difícil.

Quizás incluso te de ideas sobre cómo tratar esto en tu salón de clases, o te ayude a entender mejor a tu hij@.

De cualquier manera, es algo que debemos tener en cuenta sobre la naturaleza humana; conociendo más nuestra naturaleza podría resultar en un excelente resultado a mediano o largo plazo.

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Fuentes

Estudio