¡La entrevista lo es todo!

Mucho se sabe de procesos de diseño, otros hablan de la importancia o no del contexto, la luz, el tema del clima etc. Lo cierto es que las actuales tendencias nos sugieren o nos dan a entender, una separación de conceptos que perjudican el pensamiento arquitectónico universal de los estudiantes y profesionales de esta era, sin embargo existe un tema del que poco se habla y el cual es también fundamental para el buen desarrollo de un proyecto, me refiero a la entrevista previa con el cliente.

¡La entrevista con el cliente, marca el inicio de una relación, que según sean los acuerdos, marcara en gran medida el triunfo o fracaso de un proyecto!

¿Cómo vamos a crear, sino conocemos las necesidades del cliente?

Autor: Arquimanuel (acuarela, creyon y marcador).
Título: pensando en otras cosas.

Recordemos a uno de los arquitectos más famosos de Venezuela, Carlos Raul Villanueva, celebre profesional de la Arquitectura nacido en Londres y precursor del movimiento moderno en este país suramericano, una de sus más celebres frases entre otras es “La arquitectura es un arte social por excelencia”. Tomando en cuenta el pensamiento de este ilustre maestro, vemos que nos invita a considerar que una de las más importantes prioridades para el diseñador de espacios es el ser humano, la sociedad que transita y vive la arquitectura, podemos decir que la Arquitectura se siente a través de quien la experimenta, los espacios crean sensaciones y percepciones que producen en quien los observa rechazo o aceptación.
Por tanto conocer al cliente y sus necesidades es como sentarse en medicina frente a un paciente que necesita nuestra atención inmediata, debemos sentir, pensar, vivir lo que siente el cliente, algunos colegas consideran que el Arquitecto diseña y el público se adapta a estos diseños, con mucho respeto por la diversidad de opiniones, puedo decir que en muchos casos no es cierto, en la mayoría de los casos el cliente crea sus propios espacios según su uso y costumbres cotidianas. Considero muy importante escuchar al cliente, ser partidarios del respeto y humildad al momento del intercambio con el cliente es fundamental para el buen desenvolvimiento del proyecto a futuro.

¡Una actitud correcta!

Autor: Arquimanuel (Acuarela, creyon y marcador)
Título: Solo escucha y anota

Un arquitecto debe escuchar, comprender, aceptar cuando está equivocado así como hacer propuestas que incentiven al cliente. Adoptando una actitud colaborativa cosecharemos muchos frutos positivos en nuestro desempeño, creciendo, ayudando a las personas en sus necesidades, siempre pensando en el objetivo importante como lo es el servicio social. Sin embargo no significa que debes estar de acuerdo con las ideas del cliente que a nuestro criterio parezcan descabelladas, ese es el preciso momento para demostrar nuestro profesionalismo, ética y elocuencia de nuestra personalidad.

Autor: Arquimanuel (Acuarela, creyon y marcador)
Título: Ideas descabelladas

Los casos más curiosos

Entre varios proyectos realizados en 18 años puedo decir que uno de los casos más complejos en tratos con clientes se refiere a las viviendas, ¡sí! Las viviendas, se preguntaran ¿Por qué?, si lo pensamos podemos pensar en lo siguiente, la vivienda no es solo un espacio para vivir, ¡debe ser un hogar! Muchas familias visualizan sus sueños y metas en un hogar donde sus hijos crecerán, donde sus integrantes florecerán, allí vivirán triunfos y fracasos, reflexionaran y producirán sueños. Cuando escuchas a un cliente que desea un hogar, te parecerá familiar la siguiente frase, “sueño con una casa con las siguientes características…” muchos profesionales de la arquitectura tenemos esta conversación en nuestra memoria, y en este punto debemos ser conscientes de lo siguiente: el cliente no solo te está diciendo su idea, también te está confiando sus sueños de vida ¡hay que tomarlo en cuenta!

Aquella persona misteriosa, la cual puede cambiar resultados

Existe gran variedad de aspectos en el diseño de una vivienda, todo debe funcionar, la función es prioridad en la creación de los espacios, sin embargo como dato curioso con respecto a los clientes, existe un punto peligroso para el desempeño que muchas veces no logramos detectar a tiempo. Existen los clientes que manejan el dinero y con quien puedes establecer algunos acuerdos, sin embargo hay una persona que debes identificar lo mas rápido posible cuando tengas la oportunidad de diseñar una vivienda para un grupo familiar, de esa manera evitaras pasar malos ratos y perder el tiempo desde el principio, ¿sabes de quien hablo? ¡Si señor! La esposa o esposo del posible cliente, ¿por qué es importante este punto? Imagina que llegas a algún acuerdo con una de las partes, de pronto después de un buen tiempo de trabajo te dice el cliente “me gusta amigo, sin embargo quiero que mi esposa (so) lo vea y opine” ¡Alerta! Si no tomaste la precaución de conversar con esa persona que aún no conoces, ¡prepárate! Es posible que debas hacer todo de nuevo.
Por eso cada vez que tengas la oportunidad de diseñar un proyecto resultado de un objetivo familiar, realiza la siguiente pregunta clave “amigo (ga) ¿usted tiene esposa (so)?” si su respuesta es afirmativa, no dudes en preguntar “¿y su compañero que ideas tiene?” si te dice “No, ella o él no tiene nada que opinar” ¡no le creas! Busca la manera de hablar con esa persona que no conoces. Te sorprenderá lo diferente que pueden ser los resultados si tomas en cuenta este pequeño consejo, parecerá tonto, pero cuando lo experimentes recordaras estas líneas.
Como arquitectos debemos tener un pensamiento universal, ser capaces de conversar en diferentes niveles y con respecto a muchos temas, a veces estamos preparados técnicamente pero en el aspecto social nos falta mucho por desarrollar, tomemos en cuenta que diseñamos para personas y sociedades, no creamos obras para ser solo vistas, creamos espacios que cobran vida a través del uso diario de las personas que las hacen vivir, respirar, funcionar, cada Arquitecto o profesional tiene sus anécdotas interesantes y de las cuales podemos aprender, espero estas pequeñas líneas contribuyan un poco a nuestro crecimiento el cual nunca se detiene.