Leyendas, mitos y cuentos siempre son de gran agrado para escuchar, leer o ver. Desde años nos han encantado las historias épicas, aventuras de héroes legendarios o romances imposibles, que han llegado a lo más profundo de nuestro kokoro, pero… ¿Por qué nos gusta tanto?

Según estudios los relatos bien hechos, pueden llevarnos a conectar con nuestros sentimientos más profundos y hacernos partes de ese mundo narrado, no solo se proyecta en nuestra cabeza, sino que interpretamos que nos está pasando.

Podemos encontrarlos en los comerciales contando una historia donde el producto es el protagonista, o en los videos musicales donde puede narrarse una historia de amor, e incluso en los mismos chismes y anécdotas tienen carácter narrativo.

Desde que el hombre tiene conciencia de sí mismo, son parte de nuestra idiosincrasia, gracias a los relatos e historias sabemos de dónde venimos, conocemos nuestra cultura e identidad regional, nacional y global.

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Con la llegada de las nuevas tecnologías las herramientas para contar una historia se han vuelto mucho más sofisticadas donde la combinación de imagen y audio hacen que contar un cuento sea simplemente magnifico, se puede trasmitir al espectador sentimientos de amor, tristeza, soledad, terror, valentía ect. Todo dependiendo de la intención que se tenga.

Relatos de hechos que tal vez ocurrieron o no, son muy llamativos, los hay en todo el globo, indistintamente de la cultura o religión todos cuenta su historia o pasado a través de héroes fantásticos o sucesos extraordinarios que son los que rigen nuestras creencias en la actualidad.

Los mitos nos hablan de situaciones de “Dioses” y orígenes del mundo, mientras que las leyendas son relatos fantásticos comúnmente sobrenaturales alrededor de hechos históricos.

Son muy comunes los relatos de los antiguos seres divinos que han hecho algún milagro o aporte de carácter celestial a la humanidad, y que por lo tanto, su estatus se ha elevado hasta ser deidades o iluminados, nos cuentan las luchas de este individuo y lo que han hecho en el paso. Se convierte en ese ejemplo moral a seguir para cada cultura. Como la dirección hacia la cual ellos deben aspirar y lo que es “correcto”.

En internet hace ya bastante tiempo se popularizaron los llamados mitos urbanos donde la esencia de misterio y terror era o es de gran fascinación para nosotros los internautas, aunque sabemos que muchas de ellas son ficticios, nos causan un mar de emociones que solo podemos equiparar a comer deliciosos dulces , escuchamos bellas melodías o cuando recibimos cumplidos.

Las historias de terror o incertidumbre del suspenso que se supone nos debería causar repulsión no es así, como sabemos que no estamos en peligro real podemos sentir solo el placer de toda la actividad química que se genera en nuestra cabecita. “Me asusta pero me gusta” (Solo espera a que termine la película y caiga la noche)

Por estas razones los cuentos vengan como vengan nos encantan tanto, nos hace partícipe de un mundo totalmente fantástico, épico, ideal o nuevo sin movernos físicamente a el, por eso, podemos llegar a ser muy meticulosos y hasta frikis con el argumento y la coherencia de nuestras series favoritas. También es la razón por la que el internet y la TV son tan adictivas, pero eso ya es tema para otro artículo.