El efecto cascada… ¿has escuchado hablar del efecto cascada? Bien, el efecto cascada no es un virus exactamente aunque se le llama efecto cascada porque se contagia ¿y qué es lo que se contagia? ¿Cuáles son los síntomas? ¿A quién afecta? Tranquilo este es otro tipo de virus pero, muy contagioso.

Según investigaciones de la universidad en Harvard han evidenciado que, si eres generoso, podrás inspirar a 3 personas más que seguirán tu ejemplo. Puedo decir después de esto que podemos multiplicar la generosidad y propagarla por todos lados… Una buena idea sería que todos nos contagiemos. La generosidad resulta contagiosa tal cual como si fuese un virus o una simple gripe.

Ya leíste como se contagia un virus ¿no? Ahora la generosidad también se puede contagiar por gotas que dejas en cada lugar en donde llegas. Soy de esos usuarios que siempre está pendiente del contenido de grandes y pequeños, todos aquí tenemos grandes cosas que aportar y he aprendido mucho de todos. Aquí podemos contagiar nuestra buena conducta sobre los demás mientras comentamos y apreciamos algo que de verdad es valorado por nosotros.

Un estudio publicado en la revista Psychological Bulletin reveló que gastar el dinero en otras personas, antes que en uno mismo, provoca felicidad. En sí, los resultados de esta investigación evidencian que cuando haces donaciones a organizaciones benéficas o ayudas a quien lo necesite de verdad, te sentirás mejor de lo que te sientes cuando derrochas el dinero en ti mismo. Bueno en mi país son pocos los que se dan el lujo de derrochar dinero pero, sin dudarlo cuando puedas aportar y ayudar de forma monetaria alguna buena causa, te sentirás bien siempre que lo hagas.

No necesitas dar dinero siempre para ser generoso, existen otras formas de aportar y mejorar. Tienes casi 90 mil millones de neuronas, células cerebrales, en tu cráneo. Estos son seres vivos reales, que están cargados y funcionan con energía electroquímica, al igual que todos los seres vivos en la tierra. Cuando compartes un abrazo, un beso o incluso una palabra amable y una sonrisa, aumentas la cantidad de oxitocina y otros neurotransmisores saludables que te llenan de placer. Aunque estos pueden ser producidos por la adicción, digamos a tu teléfono, tu cerveza o vodka, puedes experimentar la toxina y la adicción de forma gratuita al aprender a compartir, amar, dar y ser apreciado.