Hoy yo también me desperté de esa manera y justo almorzando dije ‘sabes, esa luz al final del túnel no la veo’, luego reflexione deleitándome con mi hija y me di cuenta que podemos estar muy agobiadas y nos pueden pasar muchas cosas pero Dios no, nos desampara y esa fé que llevamos dentro no podemos perderla.
Un fuerte abrazo.