se ha mudado, la lluvia se fue;

se han mostrado las flores en la tierra,

el tiempo de la canción ha venido,

y en nuestro país se ha oído la voz de la tórtola.

Cantares 2:11-12

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¡Qué bello contemplar un campo florecido! A diferencia de un terreno árido, desierto, agrietado e infértil. Estoy segura que todos decidieramos estar en el primero.
Al leer este hermoso verso de la Biblia, pensaba en mi nación, Venezuela. Y me llenó de esperanza, apliqué cada palabra de éste versículo en mi país y eso me confortó. Creo que hay algo que nos puede ayudar mucho en este tiempo y es mantener la esperanza. Esa fe de que todo éste invierno va a pasar, la tormenta fuerte se irá, hasta llegar la bonanza que todos añoramos. El presente será solo un recuerdo. Ver esa Venezuela florecer y que su aroma llegue a los más lejanos lugares de la tierra.

"El tiempo de la canción ha venido"

¡Cuánto significado encierra esta frase!

Cuando llega la hora de cantar o bien sea la hora de la música, en una fiesta, celebración o boda, todos sabemos que el ambiente cambia, se genera un buen momento, muchos se preparan para bailar, cantar, gritar, pasarla bien. Yo lo imagino como un momento de libertad, de alegría, de disfrute y contentamiento.

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Soñemos y creamos juntos que ese nuevo día llegará para Venezuela.
Resplandecerá la luz. Y podremos disfrutar pleno gozo, alegría, libertad. ¡Ánimo! Éste presente pasará.

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Retomemos cada mañana las fuerzas.
Esto es solo un momento,
un momento que confiamos está por terminar.

Y finalmente el verso acaba diciendo:

"Y en nuestro país se ha oído la voz de la tórtola"

No se cuántos han despertado y han visto los pájaros cerca de su ventana cantando, como una muestra de alegría. Hay gente que dice: "Los pajaritos están alegres porque están cantando".

Ya no será el llanto o la queja, sino que tendremos un nuevo amanecer, cargado de buenas noticias, por nuestras ventanas se oirá un nuevo canto de alegría que saldrá del corazón de cada venezolano.

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Hasta la próxima.