Pasó mi cumpleaños y no me di cuenta...

Hola amigos de Steemit… He estado ausente por un largo tiempo, pero no puedo decir que estuve de vacaciones, y menos en Venezuela, un país maravilloso, pero que atraviesa una crisis que nos está consumiendo los días…

Pasó mi cumpleaños y no me di cuenta, no lo entendí hasta hoy, diez días después cuando supe que este mes es el abril de mis amores. Hoy el mes me embriagó con el olor a lluvia de un abril pasado, de unos recuerdos cálidos cuando la familia y los amigos venían a la casa con la frecuencia que un café, unos pasabocas y un transporte fluido lo permitían. Ahora, para los que no nos damos por vencidos, los días se nos van en la insistencia de concretar a medias nuestros sueños… Si antes en un proyecto te acompañaban cuarenta personas, hoy solo te acompañan diez, y ya es un logro inconmensurable; pero algo grande, inmenso, se salva de toda esta situación y es el hecho de descubrir el alma de las personas.

Yo rescato las almas nobles y no hablaré de las transfiguradas por una situación que arropa cuando no hace frío, sino de aquellas que pese a tanta adversidad insisten en brindar esa mano amiga que ayuda a superar el risco que hace sangrar las rodillas… He visto como vecinos se organizan en una olla comunitaria para salvar el almuerzo del domingo, como se unen personas para conseguir los zapatos de una niña que quiere seguir yendo a la escuela y como familias se asisten con el diario para no permitir que nadie desfallezca en esta lucha que se libra día a día.

Sí, sabemos que ante este desconcierto en el que vivimos tenemos que garantizar nuestro bienestar, pero no somos nada como seres humanos, como sociedad y como país si no ayudamos desde nuestras distintas posibilidades al prójimo, es por esto que, con este análisis con el que he decidido volver a Steemit, hago un llamado a la reflexión… ¿Cómo estoy sobrellevando esta situación? ¿Cuántas críticas realizo al día? ¿Qué critico? ¿Será envidia? ¿Será orgullo? ¿Será felicidad de ver a alguien más alcanzar sueños en este tiempo? ¿Por qué tal persona actúa de determinada manera? ¿realmente esa persona que sientes que te juzga lo está haciendo? ¿Y si lo está haciendo, es relevante para ti su juicio? ¿Y si es relevante, puedes hacer algo para mejorar la situación? Puedo seguir un largo rato y se me ocurrirán más ejemplos, porque mientras más preguntas surjan en torno a esta situación, más oportunidades tendremos de mejorar nuestra conducta y hacernos mejores ciudadanos, con nuestros desaciertos, con nuestras imperfecciones, con nuestras equivocaciones, pero sin duda, mejores ciudadanos.

En fin, les decía que he estado trabajando para organizarme mejor y sentirme más productiva, y lo he estado logrando, por lo que en los próximos días me verán por acá compartiendo mis cuentos, reflexiones y algunas cosas que se me irán ocurriendo, para mantener viva también esta maravillosa oportunidad que se nos ha presentado en forma de red social.

Agradezco infinito su lectura, y aplaudo que hayan llegado hasta aquí porque quizás logré en alguna línea sembrar la idea de que podemos ser cada vez mejores personas y dejar de verdad una bonita huella en este mundo… ¡Hasta la próxima!