CRONICAS BANCARIAS

¡Hola amigos! ¿Cómo están? espero que bien, que como yo hayan conseguido efectivo hoy en el banco. Oficialmente paso a engrosar la lista de personas que van al banco todos los días (o casi todos) a retirar lo que sea que les nazca al banco darnos como si fuera caridad o limosna. 

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Dejando quejas y lamentos a un lado, es increíble la cantidad de anécdotas con las que uno sale del banco a final de su travesía. Es que al final no queda de otra, si quieres sobrevivir a la cola debes aceptarla tal cual es y a las personas que comparten el yugo contigo, nuestros amigos bancarios, ya que los ves todos los días en la cola y conversas con ellos y les cuentas tu vida, pero fuera de allí no son nada tuyo. Es curiosa esta modalidad y uno se vuelve hasta filosófico, para aquellos que sufren de impaciencia un banco no es su lugar.

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Cómo buena conversadora que soy, reconozco a otro conversador donde quiera que vaya y como buena oyente detecto cuando alguien tiene ganas de desahogarse o simplemente dejar que te desahogues tú. Creo que la variedad de temas posibles son infinitas, eso sí, todas recaen inevitablemente en la crisis en todo su esplendor y en los causantes de ella.

Un día de estos tuve curiosidad y le pregunté a una chica por qué ella iba todos los días al banco, a lo que me contó lo siguiente: "Ella necesitaba viajar a dónde vivía su esposo, porque por su trabajo era muy lejos, en otro estado y que la única manera de no perecer en una cola en el terminal para conseguir un bus que aceptara tranferencias o tuviera punto debía conseguir efectivo". Lo irónico de su historia era que ella llevaba semanas yendo al banco todos los días y debía sufrir su cuota de penalidades para reunir de 100 en 100 (lo que da regularmente el banco) para reunir los millones que valía el pasaje porque ella consideraba que la cola para conseguir un bus con punto era menos llevadera que la cola del banco. 

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¿Qué harían ustedes amigos? El pasaje en efectivo eran 2 millones y con punto 6 millones, por punto debía hacer una cola sin esperanza, ya que es difícil conseguir uno; y con efectivo era seguro pero debía ir al banco todos los días hasta conseguir la suma, sin contar lo extra que iba a necesitar para los imprevistos. 

Cómo ella, todos tenemos un motivo para ir seguido al banco, yo lo hago porque es la única manera de conseguirlo para pagar el pasaje y ¿Ustedes? ¿Qué los motiva? ¿También tienen amigos bancarios?