Las influencias de Valle-Inclán, en la literatura de Javier Sierra.

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Recuerdo la primera vez que leí una novela de Javier Sierra. Se titula: “La cena secreta”. Recibió muy buenas críticas. Incluso se llegó a decir que era mejor novela del mismo tópico que la de Dan Brown y “El código Da Vinci”. Lo que inmediatamente llamó la atención es esa capacidad que tiene como autor de proponer el reto de encontrar una respuesta ante una cuestión de manera intensa.

No sólo en la novela citada en el párrafo anterior, sino en prácticamente todas sus obras. Se nota en ellas una invitación a ser partícipes como lectores, a una aventura de lo que es el conocimiento y el saber. Naturalmente que, como todo escritor, tiene sus influencias literarias. Y en el caso concreto de la novela titulada: “El fuego invisible”; se nota las influencias del escritor Valle-Inclán.

La influencia directa se rescata en el libro del autor Valle-Inclán titulado: “La lámpara maravillosa. Ejercicios espirituales”. Con la aparición editorial de este libro en el año de 1922, el mundo literario se encontró con una nueva forma de mirar al mundo que nos rodea y la propia existencia. Encontramos en sus pasajes rasgos distintivos de nuevas formas de pensamiento.

Otra influencia, un tanto más esquemática que se puede rescatar es la del gran escritor Umberto Eco, y el libro titulado “El péndulo de Foulcautl”. De hecho, si uno ha leído este libro recién citado, pensaría que la novela de Javier Sierra es una especie de continuidad, no de una trama en sí, sino de una lectura claramente definida respecto a la búsqueda del saber.

Hay que señalar que en la serie de críticas literarias, se han mostrado algunos especialistas un poco sorprendidos por el manejo de la trama. Tienen la sensación de que el autor Javier Sierra no pensó muy bien en que el lector podría sentirse un poco sorprendido por el hecho de mostrar datos y datos de manera contínua, dando al lector esa sensación de presunción intelectual del autor.

Hay otros críticos que señalan que la historia, en relación a los personajes, suelen ser muy arquetípicos y lentos en sus acciones dentro de la historia. Hay quienes incluso señalan que suele ser predecible, hasta cierto punto, el accionar de los protagonistas. Existen más críticas al respecto. Sin embargo, algo que es digno de rescatar es que la novela es sugerente para leer.

Se debe tener un poco de paciencia y sobre todo, estar dispuesto a leer y, sobre todo, disfrutar esta obra y poco a poco irá descubriendo que es rescatable este trabajo literario. Al respecto, una de las cosas que suelen rescatarse y que además del mundo esotérico, (influencia evidente del autor Valle-Inclán), hay una carga mística innegable.

Y lo más relevante, esa promoción sutil por el amor a la palabra. No es una situación gratuita que el personaje principal, Salas, sea un lingüista reconocido que más que obsesionarse por las palabras, las respeta y dignifica. Eso queda claramente establecido en la psique del personaje. Por lo demás puede disfrutarse la lectura por la aventura en busca de algo.