EL OLVIDO

La neblina densa cautiva las ventanas de la habitación, el silencio se encierra en la esquina de sotano desolado, recordar las melodias de un viejo toca discos, recordar el ardiente sol con destellos que ciegan la vista en segundos.
Las ramas de los arboles se agitan y golpean intensamente la venta de su habitacion, dies pizadas, dies noches sin su rostro replandeciente, mimicas de unas manos mal talladas , manos mal vistas, solo rebozan en el orillo de la escalera, recordar la calidad bienvenida que depositaba esperanza e ilusion , cierra sus ojos, cierra sus manos, cierra la ventana que se abre con la brisa de la noche. recordar que no te pude olvidar, al olvido le despido tu ausencia pero no su sonrisa que resplandece en las noches frias, no al choque de su sentar, que se desliza en el sofa, no al olvido de su tenue aroma que viajaba por los rincones de la casa, recordar que aun se vive , recordar que el naufragio es turbulento pero no dosificado, si me deslizo al arrullo de sus brazos, he de olvidar su presencia , he dejar de recordar.