Natilla de Minion con Galleta
Ingredientes: Para 2 personas aprox.
leche ( entera, 250 ml.)
limón ( medio)
canela en rama ( media rama)
esencia aroma de vainilla ( unas gotas )
huevos ( solo las yemas, 3 uds.)
azúcar ( 45 gr. )
galletas de chocolate rellenas de crema
chocolate negro ( pepitas)
Paso 1:
Coloca un cazo con la leche, un trozo de corteza de limón sin la parte blanca, la canela en rama y la vaina o la esencia de vainilla abierta al fuego. Calienta hasta que empiece a hervir. Retira del fuego y deja que la leche infusione durante 15 minutos para que se impregne de todos los aromas; finalmente, cuélala.
Paso 2:
Echa las yemas de huevo en un recipiente amplio y bate enérgicamente con unas varillas. Cuando adquieran un aspecto espumoso, agrega un poco de la leche caliente sin dejar de batir para que las yemas no cuajen. Añade el azúcar y sigue trabajando vigorosamente la mezcla con las varillas hasta que todo se integre uniformemente.
Paso 3:
Incorpora muy poco a poco la mezcla de huevos y azúcar al recipiente de leche templada. Durante toda la operación no podrás dejar de batir porque siempre existe el peligro de que las yemas cuajen con la temperatura elevada. Una vez esté todo mezclado, vuelve a colocar el cazo a fuego suave y sigue batiendo hasta que las natillas espesen. No deben hervir en ningún momento.
Paso 4:
Vierte las natillas en recipientes individuales y mételas en la nevera hasta que se enfríen.
Paso 5:
Cuando las natillas estén listas para servir, coge una galleta Chops choc cream de DIA y ábrela por la mitad, de modo que la capa de relleno quede al descubierto. De este modo, si dejamos reposar una mitad sobre las natillas con el relleno hacia arriba, tendremos un círculo blanco bordeado de negro que será el ojo del Minion. La pupila la puedes hacer con una pepita de chocolate. El resto de detalles pueden elaborarse, de menos a más precisión, con sirope de chocolate, fideítos también de chocolate o fondant negro.
Presentación:
Sirve tus natillas Minion con galleta a los comensales y disfruta de su cara de asombro. ¡Son preciosas y muy divertidas!