Aprovechar cada oportunidad (o cómo casi no llego hoy)
En su momento comentamos en el equipo tener varios posts y reflexiones “en reserva” para días de nula inspiración por mi parte o por si surgiera alguna complicación.
Pero no quería estar creando un sin fin de posts “prefabricados” sino realmente ir escribiendo según me fuera saliendo de forma natural, pensando y reflexionando sobre los diferentes temas.
Y mira tú por dónde, antes de lo que pensaba, ha llegado el momento en que se me ha echado el tiempo encima, y por poco se me pasa ponerme a escribir.
Por supuesto, cuanto más apurado estás, menos te salen las palabras.
Resulta que mi pareja Sofía lleva un mes de viaje por Amsterdam y ahora Bulgaria, yo estaba en Rumanía con mi hija Jacqui, la cual pasado mañana se marcha de vuelta a España, y hemos quedado todos, junto a nuestra amiga Sara, en Bulgaria para compartir unos días.
Y sí, hoy ha sido un día intenso de paseos, visitas, almuerzos, risas, reuniones con nuevos amigos (Cory de la Embajada de EEUU en Bulgaria), más paseos y risas, helados, intento de montar en una Half-Bike (no he sido capaz, pero lo volveré a intentar en otro momento) y finalmente ¡¡¡ostras, el mail!!! (mensaje de whatsapp de Lau Moreno, mi mano derecha; Elisabet Muñoz es la izquierda ;-) ) ¿¿Dónde está el texto para programar hoy…??
… y no tenía nada escrito… Más aún, siendo totalmente sincero, ni siquiera pensado…
Había disfrutado tanto el día de hoy, que se me ha ido totalmente de la cabeza.
Así que, en vez de reciclar algo del blog o forzar cualquier cosa, me he puesto a escribir sobre lo ocurrido, con total franqueza con la única idea de pedirte perdón por casi-fallar a mi cita contigo.
¿Pero sabes qué? Esto mismo también es una lección que se convierte en reflexión
Es importantísimo disfrutar del momento cuando llega: días como hoy no se pueden planificar ni forzar, surgen cuando tienen que surgir, por lo tanto no hay que sentirse mal por hacerlo.
Es fundamental tener un equipo de confianza cuando la empresa crece para que te puedan “cubrir la espalda”. Si aún no has llegado a ese punto, un consejo: empieza a documentar todos los procesos de tu negocio, para que cuando tengas intención de incorporar miembros a tu equipo, puedas hacer una formación sencilla y rápida.
Hay que ser más previsor, mea culpa. Debería tener al menos algo escrito con unos días de antelación. Por otro lado, me gusta ser espontáneo e improvisar si hace falta. Como hoy, que saldrá este mail 2 horas tarde. Por lo tanto, busca tu formato, pero recuerda, más vale acción imperfecta que parálisis por intentar alcanzar una perfección imposible.
Tener compromiso con lo que haces. Aunque no seamos perfectos en nuestras tareas, ejecuciones, planificaciones, ideas o proyectos, da igual. Lo que importa es que tengamos compromiso con nuestro plan, con nuestros clientes, con nosotros mismos.
Probablemente podríamos continuar la lista un buen rato más, pero si me quedo, este mail no sale hoy. ¿Quizás me quieres dar alguna sugerencia y la complementamos en los próximos días?