Entre la persistencia del tiempo y la vanidad
Entre la persistencia del tiempo y la vanidad
Por la antigua sabiduría entendemos que en esta vida todo tiene su momento, un momento oportuno para todo lo que se quiere. ¿Se va el tiempo? Eso no lo sabemos del todo —ni siquiera nos ponemos de acuerdo en definirlo— pero lo cierto es que nos esfumamos en él. Pasa el tiempo como un suspiro imperceptible, ineluctable, persistente; y nosotros estamos sumergidos en su devenir. Por tanto, conviene saber cuál es la suma de instantes que nos corresponde y aprovechar ese espacio para hacer la tarea que nos obliga. Quizás dejemos tallada sobre alguna roca una huella que perpetúe nuestra memoria. Con todo, esto también es vanidad. —Ítalo