Otra vez sin remitente
Quédate así, distante.
Como un recuerdo latente, entre varios mundos.
Para recordarte, entre mi tiempo de paz, porque no estas; y
ciertamente no regresaras.
Quédate así, entre millas.
Para saber, que, en esta realidad ni en la ficticia, aparecerás.
Gracias, remitente inexistente.
Por hacerme sentir, por ser, parte de mí, por inspirarme y sobre
todo porque te fuiste.
Un saludo, cordialmente, la chica inefable.
Bonito poema.
Que linda Poesia,
las dos tenemos fotos con esa Medusa :)