Ocho tips para que no contraigas un hongo vaginal cuando vayas a la playa
Si te encanta ir a la playa o la piscina, debes tomar en cuenta tu salud vaginal, por esa razón te traemos 8 tips para el cuidado adecuado.
Ingredientes
150 gramos de Harina
100 gramos de pan rallado
3 unidades de Huevos
¼ unidad de cebolla
100 gramos de jamón
200 mililitros de Leche
150 gramos de queso rallado
2 cucharadas soperas de ajo molido
2 cucharadas de postre de Sal
2 cucharadas soperas de aceite
Preparación
Pelamos y picamos la cebolla. Si en casa no gusta mucho, pícala todo lo fino que puedes y no se darán ni cuenta. En un cazo con agua pondremos a cocer dos de los huevos.
Calentamos en un cazo amplio el aceite, y cuando esté templado, pochamos la cebolla con la sal. Dejamos que la cebolla sude para que después las croquetas de jamón, queso y huevo tenga ese juguillo.
Cuando hayan clareado completamente, sumamos el ajo en polvo. Si fueran dientes de ajo habría que echarlos cuando la cebolla comenzará a blanquear. También añadimos el jamón.
Inmediatamente después comenzamos a añadir la harina y la leche, sin dejar de remover. De harina te recomiendo más que un par de cucharadas soperas o corremos el riesgo que nos queden pastosas como las croquetas compradas. Movemos bien hasta que obtengamos una masa suave y ligera.
Ahora es el turno del queso rallado, pero con el fuego al mínimo para que no se pegue la masa de las croquetas de jamón y huevo. Verás que coge cuerpo. Cuando puedas mantener la cuchara sin que caiga, listo.
En el tiempo que tarda en estar en su punto la masa de las croquetas de jamón y queso se habrán cocido los huevos. Se pelan y se pican.
Se añade el huevo picado a la masa base y se mezcla bien. Esta se deja reposar durante un par de horas en el frigorífico tapado con film transparente.
Tras este tiempo, podemos hacer las croquetas del tamaño y la forma que queramos. Las rebozamos primero en harina, huevo batido (el tercero que no habíamos cocido) y pan rallado, y las freímos en la sartén con abundante aceite.