Un sitio de nuestra América latina, conocido por muchos pero ignorado por otros es el Panteón Nacional de Venezuela, un lugar histórico donde se guarda mucho de lo que hoy somos como país, el edificio donde reposan los restos de los grandes ilustres venezolanos. Está ubicado en la ciudad de Caracas, capital del país, unos centenares de años atrás en ese lugar estaba ubicada la iglesia de la santísima trinidad, pero por decreto del presidente Antonio Guzmán Blanco por allá en la fecha de 1874 fue convertida la estructura de dicha iglesia en el edificio que hoy aun sigue en pie.

Lo que hace más importante este lugar es que allí reposan los restos del libertador Simón Bolívar, el mismo que luchó por la libertad de su país, Venezuela y la libertad de otros países hermanos.

El sueño del libertador siempre fue que su amada Venezuela fuera libre e independiente, sueño que hoy se ve empañado por la realidad que se vive en la actualidad. Cuando vas al panteón puedes sentir esa energía que emanan de tan importante personajes y es inevitable pensar en el dolor que sentimos los venezolanos, al ver la anarquía en la que estamos viviendo.

Yo nací en el año 1983, en una familia de clase media, de mi infancia tengo sólo buenos recuerdos, tal vez la inocencia de la misma niñez me hacía ver todo bonito, mi madre era educadora, teníamos vivienda, alimentación, vestido, calzado, teníamos salidas familiares, viajes, educación de calidad. Algo tan diferente a lo que se vive ahora; hambre, angustia, enfermedades, escasez, injusticias, autoritarismo, tristezas, separaciones, desnudez. Es inevitable estar en este lugar y no recordar los pensamientos de Bolívar, tan certeros y tan aplicable a la realidad, es inevitable pensar en querer seguir luchando para volver a ser esa Venezuela bonita en donde nacimos y crecimos, querer que las cosas cambien, que nuestros hijos puedan tener mucho más de lo que nosotros tuvimos, escribo esto con el corazón arrugado, porque me duele mi tierra, porque cada vez se hace más duro permanecer en ella, pero soy de las que piensa en que en la unión está la fuerza, si nos unimos todos como hermanos, como un día luchó el libertador, podremos liberar a nuestra amada Venezuela.

Espero disfruten de estas fotografías que realicé mientras estuve viviendo en la ciudad de caracas, conociendo un poco más de la historia de mi país.

Para finalizar les comparto uno de los pensamientos más fuertes a mi parecer de este gran hombre nacido en Venezuela: