Un paseo por Jimena de la Frontera (Cádiz)

Como cada día de descanso de trabajo intento visitar un poco de cultura malagueña o andaluza, estas dos últimas semanas visité Sevilla y este domingo Jimena de la Frontera que ya sólo el nombre nos sitúa en la Hispania de reconquista donde sólo quedaba por recuperar la llamada Al Andalus y todo el arco de tierra que la rodeaba era denominada con el nombre de la localidad y el apelativo de la Frontera entre la Hispania reconquistada por los cristianos y el territorio que tantos siglos permaneciera bajo mandado árabe y que resistieron en nuestra tierra de acogida Andalucía.

Jimena es un emplazamiento rural precioso que ahora está muy de moda en el país, lugares que se tienden a usar como escapadas de vacaciones de interior, el pueblo dispone de muchas casitas rurales de alquiler y además hay muchas viviendas en venta para ser reformadas y usadas como segunda vivienda del que busca la tranquilidad de un pueblo donde descansar en un futuro o en cada fin de semana, no miré precios pero si que son mucho más accesibles que las viviendas para el mismo uso en las zonas costeras.

Está ubicada en la provincia de Cádiz pero realmente cerca de la provincia de Málaga le calculo unas dos horas en carro y es otro de esos pueblos maravillosos de casas blancas y como cada pueblo de la Frontera con la antigua Al Andalus coronado por una impresionante construcción militar que suele dar un valor extra al pueblo en cuanto a turismo cultural.

Nos llevaron a almorzar a una antigua posada de época que posteriormente se conoció como un precioso hostal rural que gracias a las nuevas tecnologías ya puedes localizar en tripadvisor y cuyo restaurante ubicado en la mismo lugar, creo que el reconocimiento a un establecimiento es de justicia cuando el trato y sus productos te dejan tan buen sabor de boca.

El almuerzo debo reconocer que es un surtido fantástico de las especialidades de la zona, fuimos varios los comensales y entre los platos elegidos y recomendados exquisitas las berenjenas de entrante y un paté casero que era una delicia, de los platos principales hubo un poco de todo, la herencia del pastel de carne me sorprendió mucho aunque es normal cuando encuentras unos platos realmente muy elaborados, el hojaldre de pollo con salsa de almendras y champiñones es un plato de complicada elaboración y punto final de horno, el solomillo con salsa de un vino local una delicia y yo quise probar un pescado que se sirve con salsa de coco y curry que es un espectáculo, no quiero olvidar los postres ya que si de algo se enorgullece ese hostal es de un árbol que da chirimoyas y el flan de chirimoya es la primera vez que lo pruebo en mi vida, la crema de higos con yogur y piñones, el mousse de chocolate casero o el brownie de chocolate y helado nos dejó un sabor de boca para recordar antes de un largo recorrido por el pueblo y su historia.

En nuestro caminar subimos y bajamos por cada calle de Jimena de la Frontera para definitivamente subir a conocer la fantástica edificación militar de la muy pronto mostraré cada detalle tras sus murallas.