El último de la fila
Y no, no me refiero al grupo de los 80-90. Ahora te explico. Pero antes de esto...
¿Cómo llevas lo de ahorrar e invertir?
Cuando acaba el mes ¿te queda el dinero que pensabas ahorrar a principio de mes?
¿O te pasa como tantos que a mediados de mes del dinero aún te sobra mucho mes?
¿Pero sabes qué? No eres el único. Nos pasa o nos ha pasado a muchos no, muchísimos.
Y todo se debe a un pequeño detalle de apreciación:
Sabes lo que ganas.
Sabes los gastos fijos que tienes.
Pero no sabes con certeza los gastos variables que tendrás.
Sabes lo que querrías ahorrar.
Pero no sabes nunca si vas a poder llegar a ahorrar.
¿Y dónde está el problema? Muy sencillo. Que te pones el último de la fila.
Tienes que dejar de ponerte el último en la fila de “cobrar”.
Si siempre pagas a todo el mundo antes que a ti mismo, nunca sobrará para ti.
Así que prueba una cosa sencilla: cuando cobres la próxima vez, coge primero el dinero que pensabas destinar a ahorrar e invertir. Y con el resto del dinero, pagas facturas, gastos fijos y variables.
¿Y sabes qué (otra vez ;-) )? Que curiosamente vas a poder vivir casi igual. Adaptarás tu vida a lo largo del mes al dinero disponible.
Evidentemente sé realista. Si cobras 1000 y tus gastos fijos ya son 800, no pretendas ahorrar 500; no sería lógico.
¿Pruebas y me cuentas?
¿Has probado ya? ¿Qué tal el resultado?
Separar todos los meses 50€ en el corto plazo no parece mucho, pero en el largo plazo junto al milagro del interés compuesto, hace maravillas.
Pero esto, lo hablamos en otro momento.