Concurso de Microrrelatos de Ciencia Ficción #MicroCiFi256 - Semana 7 - Clon
LA REBELIÓN
La rebelión de los clones comenzó en el laboratorio. Un despechado científico, que tras una decepción amorosa le perdió fe y respeto a la humanidad, no suprimió algunos sentimientos en los embriones de todo un año. Creó una generación de copias conscientes, críticas y combativas, listas para acabar con la opresión.
En la época que comenzó la rebelión, las leyes sobre clones eran muy específicas:
Cada persona tiene derecho a tres clones en su vida, uno a la vez.
Un clon solo puede morir en un accidente, luchando en una guerra o por donar un órgano vital a su original.
Los originales no pueden hacer lo que le plazca a su clon, no pueden abusarlos en el ámbito laboral, de salud e incluso sexual.
A los clones se les suprime la capacidad reproductiva, no se deprimen, no son obesos o anoréxicos, no tienen adicciones, se alimentan sanamente y hacen ejercicios a diario para mantenerse saludables y en forma.
No hubo luchas callejeras con miles de muertos. Los clones se organizaron y elaboraron su plan de éxito. Uno a uno se deshizo de su original sin levantar sospechas. Así controlaron cada hogar, empresa, escuela, fábrica, y los laboratorios, donde siguiendo a su creador, los siguientes clones no tenían restricciones. Ahora odian, aman, se reproducen, se deprimen, engordan. Se convirtieron en sus originales. Años después, la clonación fue ilegalizada.
nice
El concepto de abusar sexualmente de tu propio clon me ha perturbado notablemente.
Suerte en el concurso ;)
Gracias @trenz por el concurso, es un buen ejercicio :). Bueno, en una sociedad como la descrita en el microrrelato, parece verosímil que puedan ocurrir abusos de todo tipo a clones que son tratados como esclavos.