La navidad es más que estrenar el 24 y el 31.

Nos acostumbramos como venezolanos a que en diciembre bebíamos, hacíamos muchas hallacas para nosotros y para todo aquel, invitábamos a reimundo a nuestras casas a celebrar, elegíamos entre carne pollo o pescado, nos acostumbramos a estrenar ropa, a comprar objetos que ni necesitábamos, a regalarle a media familia y amistades, a pintar la casa cada año, el primero de enero para la playa,…

Fuente: Arbolito de mi abuela

Este diciembre 2017 que muchos no podemos hacer eso en Venezuela, andamos con el ánimo caído, echándole la culpa a Maduro o a Capriles, y resulta que todo lo que estamos pasando hoy es el resultado de todos los errores que cometimos en el pasado como nación.

Comenzando porque no teníamos amor a la tierra de nuestro país, idolatrábamos más las cosas extranjeras que las cosas de Venezuela. Fuimos alcahuetas de las deshonestidades de las personas que nos rodeaban, aquella persona que era viva, que era tramposa y que se valía de sus habilidades comunicacionales para lograr objetivos pocos dignos, a esa persona le perdonábamos sus faltas y le decíamos “es que él es chévere y pilas” como si esa frase fuese una suerte de salvoconducto, y que hoy en día sigue más vigente que nunca.

Imagen cortesía de Gorras_vzlaa http://ligaviewer.com/gorras_vzlaa/1590804083446730177_5489796870

Históricamente como sociedad hemos estado pendiente de que un tercero nos solucione la situación actual ya que según nosotros nuestra precariedad es gracias a los empresarios explotadores y/o al gobierno, siempre habíamos estado esperando que el gobierno aumentara el sueldo, diera la beca, que el empresario nos mejorara los beneficios socioeconómicos en el trabajo…

Nos han inculcado desde que éramos niños que en Venezuela “lo tenemos todo”; bellos paisajes de montaña, lindas playas, minerales preciados, piedras preciosas, excelente ubicación geográfica, PETROLEO¡¡, pero la verdad es que no tenemos nada porque no hemos sabido cómo aprovecharlo y además son empresas extranjeras las que le han sacado el máximo provecho. Comenzaremos a tener todo eso realmente cuando sepamos administrarlo en beneficio de la nación, dejar de ser una economía rentista petrolera y nos convirtamos en una economía dependiente del turismo, la tecnología y/u otros recursos distintos al petróleo, recursos que sean producto del emprendimiento nacional sustentable.

Es verdad que como venezolanos somos personas de levantarnos temprano a trabajar, que somos dedicados en el trabajo, pero también es verdad que nos ha costado como nación ser emprendedores, hacernos cargo de nuestro presente y nuestro futuro, sin esperar “la papa pelada” por parte de un empleador o del estado. Nos ha costado ponerle un parado a quien es deshonesto y entonces lo llamamos “chévere”. Nos ha costado saber elegir un líder por la eficacia de su plan de gobierno y no por su simple carisma.

Y hoy que no tenemos todas esa opulencia a las que estábamos acostumbrados entonces buscamos culpables políticos, y no, lastimosamente la culpa está distribuida en esta hermosa nación con mucho potencial que se llama Venezuela y que por soberbia no hemos querido reconocerlo.

Estamos esperando un Robin Hood que nos salve, y resulta que no hay ningún Robín Hood en la política, y al ver que ninguno nos saca de este embrollo nos llenamos también de DESESPERANZA, otra muestra más de lo cobarde que hemos sido, y me incluyo. Nos guste o no, la solución está en nuestras manos, tenemos que asumir la responsabilidad por nuestro presente y futuro, haciendo todo lo que tenemos que hacer para salir adelante, dejar de alcahuetear al pana que hace trampa pero que es “chévere, tenemos que comenzar a creer más en nosotros mismos que en líderes políticos.

Imagen de fondo cortesía del canal de Youtube Spicus99 en el video llamado "Beneficios medicinales de las aceitunas"

Ciertamente no todos los venezolanos somos iguales, tal vez no todos estan esperando un Robin Hood, pero si una cantidad importante. Yo reconozco que lo he sido y me doy cuenta lo caro que nos ha salido. Cuando chequeaba este post antes de publicarlo me pego ya que también soy venezolano y leer estas palabras que son un poco crudas me choca un poco porque a nadie le gusta que le digan la verdad pero ciertamente, esas verdades son las que hacen crecer, como dice un dicho, más vale una verdad que te haga llorar a una mentira que te haga reír.

Diciembre es más que una estrenadera de artículos, es más que comedera y tomadera desenfrenada, diciembre es un mes para ser humilde, es un mes para la reflexión, y en muchos casos compartir tiempo de calidad con nuestros seres queridos. Con el favor de Dios y con el favor de nuestra evolución como nación, vendrán tiempos mejores.

PD: no digo que somos pueblo ya que los pueblos son de la época de la colonia, esa época de la esclavitud y aquí nadie es esclavo de nadie. Somos ciudadanos, y los dejo con una imagen de Caracas desde el Avila que me gusta:

Fotografìa cortesía de Venezuelatuya.com