"Del sufrimiento emergieron las almas más fuertes, los carácteres sólidos tienen cicatrices"

-Khalil Gibran

¿Has vivido esto?

Momentos de fuertes tempestades, en donde sientes que el mundo se te viene encima, en donde sientes que estás en un hueco, en un callejón sin salida, esos momentos que tocas fondo por desesperación, en donde los amigos son solo tu mismo, en donde la tristeza reina y se hace dueña y señora "en muchas ocasiones".

Todos en algún momento de nuestra vida pasamos por este ciclo, te digo algo: ¡ES BUENO QUE LO VIVAS! lo malo es ¡QUE TE ANCLES A ÉL!
Los momentos de fracasos son oportunidades para ver en qué hemos fallado, y ¡LEVANTARNOS! Hacer como el AVE FÉNIX, Desvanecer para renacer con toda la gloria.

Cada vez que te empecinas en quedarte anclado, tu cuerpo sufre daños tanto internos como externos, es increible como muchas enfermedades son producto del desbalance emocional que a veces llevamos.

Tu eres el dueño de tus actos, de tus decisiones y de todo lo que embarques en tu vida, el quedarte anclado en algo que nos duele lo que hará es consumirte, y hasta en cierto punto ir deteriorandote físicamente, sólo en ti esta la decisión de renacer como el Fénix o revolcarte en el fango como los cerdos.

“Por muy larga que sea la tormenta, el sol siempre vuelve a brillar entre las nubes.” Khalil Gibran