La noche fingida
La luna se bate en duelo con los primeros rayos del día y aún no sabe, loca suicida, que la noche ya es cadáver mientras ella se encarama con su último aliento sobre las azules aguas de la iluminada bahía.
La luna no lo sabe, pobre hada enamorada de las sombras, pero su negro reino de terciopelo ya ha sucumbido a la brillante alba mansa y su dorada alfombra de vida...
La luna no lo sabe, pero su halo perfumado se diluye por momentos en el reflejo argentado del Mediterráneo y sus aguas cristalinas, que como vírgenes preñadas de sol naciente, paren colores y sabores y dan a luz los aromas secuestrados de mil reflejos desbocados que luego emergen sobre los ávidos cielos,
y suspiran.
Ya es el día,
y ya la luna yace escondida
entre su melena nacarada...
Y yace la luna
sobre la escandalosa charca azul intensa
de los cielos ebrios de suspiros primerizos,
disuelta en los vuelos de las aves acicaladas
para la vida.
Mas no se ve desde mi ventana entrometida,
porque ya se halla secuestrada
por las horas del estrepitoso día...
No hay rescate en tal guarida,
sólo hay la fianza de las horas del ruido
y la locura apabullante,
sin su silencio dibujado en la suave panza
de mi amada noche fingida.
Que imagenes tan vividas @wallada Saludos :)
Gracias, darius86...!! Saludos
Me encanta esa imagen que das de la Luna convertida en tímida Selena cariñosa, tierna y pequeña como un hada.
En esta ocasión se muestra así, otras maligna, otras indiferente... Nada ni nadie tan camaleonica, seifiro... Un saludo