La libertad de expresión solamente es una falacia en ciertos países.
Mucho se habla desde hace algunos años sobre la protección y el exigir nuestros derechos ante autoridades y particulares, una situación que se acrecentó gracias a su difusión en internet, específicamente en redes sociales, sin embargo en una humilde opinión se deja de lado la obligación que viene aparejada inherentemente a cada derecho, pero ese será tema para otra ocasión, ahora el caso que leí en varias fuentes fidedignas.
Empecemos por definir el derecho del cual hablare:
¿Qué es la libertad de expresión en redes sociales?
La libertad de expresión es un derecho estrechamente conexo a la democracia protegido en cualquier forma de emisión, por lo que se contempla la protección a la manifestación de las ideas en las redes sociales, con limitantes de ley, y sometida a supervisión judicial bajo parámetros específicos para su análisis, esto en la escritura es algo positivo, pero en la realidad y con la humanidad de por medio las cosas no son así.
Un tribunal en Arabia Saudita ha condenado a muerte a un hombre basándose solamente en su actividad en Twitter (Ahora X) y YouTube, el 10 de julio de 2023, el Tribunal Penal Especializado de Arabia Saudita, en el cual se tratan asuntos vinculados con terrorismo, condenó al profesor saudí retirado Muhammad al-Ghamdi, de 54 años, varios delitos penales relacionados únicamente con su expresión pacífica en internet se impuso la pena de muerte basándose en sus tuits, retuits y su actividad en YouTube como prueba en su contra.
Al-Ghamdi fue detenido mientras estaba en compañía de su esposa e hijos el 11 de junio de 2022, frente a su vivienda en el vecindario de Al-Nouriyyah en La Meca, según señalaron a Human Rights Watch personas con conocimiento del caso, lo trasladaron a la prisión de Al-Dhahban, en el norte de Yidda, donde permaneció en régimen de aislamiento por cuatro meses, su familia no pudo contactarlo durante este período no tuvo acceso a un abogado, las autoridades trasladaron a Al-Ghamdi a la prisión de Al-Ha’ir en Riad.
Quienes lo interrogaron le preguntaban por sus tuits y opiniones políticas e indagaban cuál era su opinión sobre personas encarceladas por ejercer el derecho de libertad de expresión. Al-Ghamdi estuvo casi un año sin abogado y, cuando finalmente obtuvo representación legal, solo pudo hablar con su abogado inmediatamente antes de las audiencias judiciales.
El hermano de Al-Ghamdi, Saeed bin Nasser al-Ghamdi, es un conocido académico islámico saudí que expresa una postura crítica hacia el gobierno y vive en el exilio en el Reino Unido. En un tuit del 24 de agosto, Saeed indicó que “la falsa sentencia pretende fastidiarme personalmente tras los intentos fallidos de investigaciones que buscaban que fuera enviado de regreso al país”.
Los documentos judiciales indican que el Tribunal Penal Especializado condenó a muerte a Al-Ghamdi el 10 de julio, invocando el artículo 30 de la ley antiterrorista de Arabia Saudita, por “referirse al Rey o al Príncipe Heredero de un modo que atenta contra la religión o la justicia”, el artículo 34 por “apoyar una ideología terrorista”, el artículo 43 por “comunicarse con una entidad terrorista” y el artículo 44 por publicar noticias falsas “con la finalidad de perpetrar un delito de terrorismo”.
El fiscal pidió que se impongan las penas máximas para todos los cargos contra Al-Ghamdi. Los documentos indican que el tribunal dictó sentencia alegando que los delitos “apuntaban al estatus del Rey y el Príncipe Heredero”, y que la “magnitud de sus actos se ve amplificada por el hecho de que ocurrieron a través de una plataforma mediática global, lo que exige que se imponga un castigo severo”.En la acusación formal se citan como evidencia varios tuits con críticas a la familia real saudí, y al menos uno en el que se reclama la liberación de Salman Al-Awda, un clérigo prominente que enfrenta una posible pena de muerte por varios cargos imprecisos relacionados con sus declaraciones, relaciones y posturas políticas, y de otros conocidos académicos islámicos que están encarcelados.
Cómo podemos ver, este es una de los muchos casos que se presentan en el mundo, algunos no son tan severos cómo una pena de muerte, otros solamente son “funados” “Doxeados” o “cancelados” por exponer un pensamiento u opinión, así que se debe tener una reflexión sobre estas situaciones, sobre nuestro derecho a expresarnos, pero con la obligación que viene con ello, pero en fin, la humanidad.
Y recuerden, todos los políticos de todos los colores (Partidos) son iguales, cuando un partido no les otorga una retribución u puesto, simplemente buscan otro partido o crean el suyo.
Tal vez sea al contrario, claro esta es mi humilde forma de pensar ¿Y la de ustedes?
Héctor E. V. Villanueva.
Twitter: @abogadojalisco