Si pudiéramos preguntarnos cómo marcharían las nuevas generaciones sin la tecnología, probablemente no encontráramos respuesta. Qué sería del mundo actual, de los niños y los que en este momento de la historia no somos tan niños, sin Internet, computadora o cualquier otro dispositivo que nos ponga a la mano información de interés mundial y la no tan mundial como que la chica tranquila de la clase se casó, embarazó o mudó.

Nunca dejan de asombrarme los avances en cuanto a Redes Sociales se trata, ni la facilidad de interacción de quienes manejan estas. En este primer post no resulta necesario mostrarles el alcance increíblemente positivo que esta en especial tiene, ya que quien está novata y apenas presentándose soy yo.

Les cuento, en lo personal estuve mentalmente bloqueada a querer hacer esta presentación. La realidad es que mi negación existía por el desconocimiento del poder de conectividad o alcance para relacionarse de este primer paso y que quisiera tener con quienes se desenvuelven en este medio. Además del beneficio en fogueo que tiene.

Me llamo Isabel Sophía y dentro de mi carácter no está ser siempre muy sonriente como salgo en la foto principal. Tengo veintitantos años de edad, los suficientes como para asegurar que ya pasé por mi crisis 'Y AHORA QUÉ C$#& HAGO CON MI VIDA' de la post-adolescencia. Disfruto el arte, la filosofía, lo asombroso del cosmos, el café, unas buenas melodías progresivas y la vida en general intento vivírmela al máximo.

Desde muy pequeña sabía lo que quería para mi vida a la edad que hoy tengo, inocentemente no sabía lo cuesta arriba que sería todo. Estudié artes plásticas por muchos años —a decir verdad desde que tengo uso de razón—. Algo ocurrió en el transcurso de mi historia (que no tengo idea) y eso es algo que ya no practico pero que espero retomar pronto.

Comencé estudiando algo que, también, desde muy niña tenía claro que me enamoraba... La electrónica. Sí, es curioso que una persona que tenga inclinaciones por las artes plásticas se vaya a estudiar ingeniería, pero siempre he pensado que no se trata de tópicos sino del nivel de empatía. Por otro lado empecé a estudiar otra carrera, nada de lo que realmente me gusta pero que en ese momento de crisis creí que me serviría para lo que socialmente es correcto. En esa segunda me fue muy bien, sin embargo, en la actualidad ambas están en receso.

Venezolana en Venezuela, intentando hasta ultimas estancias seguir junto a mi gente, mi familia, mis hermanos, mi novio y sobre todas las cosas... Mi adorada madre.