En las colinas de la bahía de San Juan vivía Marly con su esposo Diego, padres de una niña de tres años. Marly y Diego están acostumbrado a apoyarse mutuamente si uno de los dos llega temprano a casa después de su jornada laboral va haciendo una que otras cosas hasta que legue el otro de trabajar y complementen sus deberes como padres en el hogar. Los Domingos después de misa iban de paseo o simplemente se quedaban en casa a disfrutar de una película.

Un día, Marly fue con sus amigas a manejar bicicletas por las calles de San Juan y después de varias horas de recorrer las calles deciden regresar a casa en eso Marly decide ir por frutas y hortalizas al supermercado, estaciona la bicicleta y entra a comprar las frutas y hortalizas, cuando sale del supermercado, camino a buscar su bicicleta un carro viene y la atropella, dándose a la fuga, el vigilante del supermercado llamada de inmediato a la ambulancia y dice que una mujer fue atropellada pero todavía sigue con vida, a los pocos minutos llega la ambulancia y la llevan al centro de salud más cercano, Marly seguía con vida, pero aun no despertaba, Diego desesperado le dejo a su hermana la niña hasta que Marly despertara, al pasar la semana, Digo estando en el trabajo lo llaman del centro de salud y le dicen que Marly acaba de despertar, Diego llega y muy emocionado le da un beso y la abraza, pero ella llora desesperadamente y todo se preguntan el porqué, el doctor le dice que el impacto del choque destrozo algunos nervios de la columna de Marly y por lo vito no va a volver a caminar; Diego al recibir esa noticia cierra los ojos y no deje de pensar, a los días a Marly le dan de alta y a partir de ahora todo será distinto para ella, al pasar los meses Diego ya estaba cansado de llevar a terapia a Marly y de faltar a veces en su trabajo, ya muchas cosas dependían de él y no de ambos.

Una mañana Diego recoge su ropa y se va de aquel hogar donde fue muy feliz con Marly y su hija, ahora la felicidad para Diego solo depende de el mismo, sin importarle nada ni nadie; Marly ahogada en llanto llama a su hermana mayor que vive a las afuera de San Juan y le cuenta lo que paso y su hermana Evelyn decide ir hasta casa de su hermana Marly, cuando Marly vio a su hermana fue otro llanto para el alma ya que todo pareciera estar derrumbándose en pedazos imposible de sostener, Evelyn su hermana de aliento de vida y de esperanza y decide viajar con ella a la capital donde hay muchos especialista y comience de nuevo las terapias, después de pasar algunos meses, Marly asistía a terapia acompañada de su hermana y de su hermosa hija.

DISEÑADO EN CANVA.

Una tarde lluviosa después de una larga terapia el medico le dice a Marly que todo este tiempo que el le ha estado haciendo la terapia ha sentido algo muy hermoso por ella, sin dudarlo ella le clava una sonrisa, pero muy apenada por su condición. Matheus, el fisioterapeuta que le hace la sesiones a Marly la ha invitado a comer en restaurant, la ayuda con la niña, la lleva la playa, caminando juntos, ven la luna y las estrellas a pesar de todo lo que ella padece. Ya habían pasado varios meses, Matheus, su hermana y su niña habían estado con ella en todo su proceso para volver a caminar, cosa que Diego daba por perdido y se alejo de ella sin importar nada, porque eso para él era una sobrecarga.

DISEÑADO EN CANVA.

Marly, muy feliz de caminar decide regresar a San Juan, donde retomaría nuevamente su trabajo y Matheus trabajaría en el centro de salud de la ciudad de San Juan. Un día, en una estación de servicios Diego ve después de tanto tiempo a Marly, él se queda sorprendido al ver con Matheus le traía un ramo de flores a aquella mujer que el dejo por no ser lo suficiente valiente en tiempos difíciles.