Claramente Jesucristo nos enseña a perdonar a nuestro prójimo, y no solo una vez al día hasta 7 veces al día, en otro pasaje podemos encontrar que nos manda a perdonar hasta 70 veces 7 puede sonar un poco facil, pero por alguna razón él recalcaba está palabra en varios de sus libros, realmente él sabía cuando difícil era este acto. Más era necesario hacerlo para poder ser libres, en ocasiones creemos dañar a otros por el hecho de que no le dirigimos la palabra.

     En realidad el daño es para nosotros mismos, no somos libres de aquella pesada carga que genera un peso de incomodidad y amargura que aunque parezca mentira es nocivo para nuestra salud a tal punto de llegar a enfermarnos a causa de está situación.

     Creo que una de las peores situaciones en las que puede vivir una persona es teniendo un alma enferma por falta de aprender a perdonar, en cierta etapa de mi vida no entendía esto y acumule muchísimo rencor dentro de mi, pero un buen día mis ojos fueron abiertos es como si se quitó un velo que me dejo ser libre. Se que fue la ayuda de Dios que me hizo traspasar esa barrera que me tenía estancada en un abismo lleno de amargura.

     Y aunque sea una decisión bastante difícil, date tu tiempo en pensar los beneficios que esto aportaría a tu vida, otra cosa muy importante es hacerlo de corazón teniendo en cuenta que será un beneficio para alivianar la pesada carga.