"Historias Asombrosas"

Bueno, les voy a contar una historia.

Trabajé como taxista durante unos dos años. Pasó el tiempo y tuve que operarme la rodilla. Por distintas causas, no me recuperé bien. Así pasaron dos años. Como no podía hacer ningún trabajo físico, volví al taxi. Trabajé dos semanas y un día vi un taxi parado en la calle. Un auto blanco lo cruzó y, aunque no había nadie en los otros autos, me quedé mirando y seguí mi viaje. Pensé que podría pasarme algo y me fui, vivía cerca. Un poco cobarde, pero cada cual salva su vida como puede; las armas llegan lejos si te disparan.

Bueno, seguí manejando el taxi y vi que un auto me seguía por las calles aledañas, esperando que parara para asaltarme. Pero yo los esquivaba, confundía las luces y así no me veían; era un barrio peligroso. Así los perdía. Un día se me pinchó la rueda cerca de la estación de servicio, pero estaba cerrada. Solo había un hombre, así que dejé el auto en la estación y me bajé, porque sabía que los ladrones andaban por ahí. Corrí por la calle con el dinero y mi teléfono, y ellos se fueron. Así me salvé.

Esta al mes que me abandono cuando me perseguían.

Ahora veo que me empieza a seguir otro auto, uno negro. Este me seguía a todas partes, así que lo denuncié a la policía con la matrícula. Después otro auto me siguió, y luego otro. Así vivía denunciando a la policía. Un día había varios autos, llamé a la policía y llegaron varios patrulleros. El problema era que no soy bueno para reconocer autos; los veía, pero no sabía qué autos eran ni qué camionetas. Al final, la policía me secuestró el taxi por unos papeles que faltaban, así que me fui a mi casa en un taxi que llamé. Pero le dije que no me dejara en mi casa, que me dejara a una cuadra. Le pagué y me tiré del taxi, quedándome en el pasto a las 3 de la mañana.

De repente, veo que vienen dos personas hacia mí. Entonces empecé a golpear la puerta de una casa con todo. La gente se asustó, salió y me dijo que me fuera. Llamé a otro taxi y a la policía y fui a mi casa. La policía nos siguió. Al rato, los vi en la calle diciendo "¿Dónde se metió? ¿En qué casa se metió?". Al final, descubrieron que vivía allí solo, pero con dos perros pitbull. Ellos se metían por los techos y llamaban a la policía, pero ya no estaban. Era una banda organizada; tenían un vigía que les avisaba cuando venía la policía y se escondían. Lo que siempre pasaba era que, de madrugada, no había nadie por la calle para verlos. Resumiendo, muchos días pasaron hasta que les puse un cartel que decía que yo no era a quien buscaban, y además que no podían hacerme nada.

Al día siguiente de dejarles el papel, vi que me salían laser rojos en el cuerpo,como miras de arma es lo que yo crei por las peliculas. Corrí de un lado a otro y logré esconderme. Afuera había uno con un arma y varios alrededor de la casa. Llamé a la policía, pero no vino. Entonces empecé a hacer un ruido tremendo,golpeando la puerta con una pala y se fueron.

Después, cada vez que venían, ponía la sirena de la policía desde YouTube; así los controlaba.por que así se despertaba los vecinos. actos desesperados por salvarme que me maten.
Ademas los veía cuando iba a comprar comida.

Entonces alquilé la casa y la de más al fondo, donde ellos entraban, acá vivo ahora y no sago más de noche.

Ahora hace un tiempo no los vi más y sigo vivo. Para mí, no solo se confundieron, sino que además querían hacer una muerte limpia, sin testigos.

Es terrorífico saligo ahora y no mirar a ningún lado; no sé si están o no.

Y esta hoy ya solo y sin ningún problema solo no puedo caminar, después de aquella operación de rodilla.

Una historia mafiosa que me tocó a mí. Todo comenzó por el taxi que manejé durante unas semanas. Alguien se metió con ellos o quedó muy mal con alguien que no lograron identificar, y creían que era yo.