¿El suicidio es la solución o existe otra solución?

  Uno de los temas más controversiales y tabú en la opinión pública es el suicidio y, en la sociedad actual esta acción ha tenido un ascenso muy peligroso por ello, me complace tener la oportunidad de compartir con ustedes en esta dinámica que ha organizado nuestro compañero @memamun ya que, es un tema que se debe debatir para así educar y crear consciencia respecto a la repercusión que tiene.

  El hombre siempre se ha caracterizado por ser complejo y, la causa de esto suele estar relacionada con la conducta ya que, nuestro comportamiento tiene muchas variantes y, a pesar de que existen diversas teorías que explican por qué nos comportamos de una manera específica, siempre salen particulares que estimulan esa complejidad.

  Partiendo de lo mencionado con anterioridad es que, los trastornos de origen mental son un mal que padecemos en muchas oportunidades y, sus motivos pueden ser detonados de diversas maneras por ello, es indispensable que analicemos nuestras emociones y en caso de que no esten equilibradas, acudamos a un especialista y de esta manera podamos prevenir un problema de salud mental.

  Determinar una o dos causas específicas que generen el pensamiento suicida en alguien es minimizar en gran medida el origen de este problema e incluso, el impacto que tiene ya que, realmente existen millones de motivos que pueden detonar este deseo y aquí quiero dejar presente que, esto es algo que lo digo con conocimiento propio porque, en el pasado llegué a considerar esta opción y quiero dejar presente que no me siento orgullosa de esto visto que, hoy día sé que existían mejores alternativas para solucionar el caos emocional en el que estaba sumergida.

  El desequilibrio emocional es una particularidad que de manera progresiva nos conlleva a desarrollar pensamientos o sentimientos de vacío y soledad; sensaciones que al mezclarse con la falta de empatía de las personas que están en nuestro entorno o en su defecto, la agresión física o psicológica de los mismos, estimulan esa idea de querer apagar nuestra vida.

  Muchas veces se dice o piensa que la decisión de suicidarse surge de un momento a otro. Sin embargo, esto no es así ya que, cuando una persona llega a esa acción o en su defecto, hace el intento de ejecutarlo; es porque tiene tiempo sintiendo la presión emocional que lo sumergió en la depresión y, al sentir que su vida no tiene valor o sentido alguno, el recurso del suicidio es lo único que se proyecta como solución.

  Aunque el suicidio no es cuestión de género, es importante hacer énfasis de que la estadística mundial en los últimos 10 años ha tenido más resonancia en los niños y, a pesar de que desde el 2020 hasta la actualidad las niñas han manifestado un ascenso muy importante, el niño sigue liderando este ranking y, entre los posibles factores que puedan estar ocasionando el resultado de esta estadística se encuentra que, a las niñas se les hace un poco más fácil comunicar sus emociones y, aquí debemos resaltar que tener la disposición de buscar ayuda es indispensable en este punto ya que, de esta manera podemos prevenir llegar al nivel de desarrollar pensamientos suicidas.

  Una de las particularidades más complejas de la depresión es el proceso de negación que sentimos al inicio y, a esto debemos sumarle la vergüenza que nos genera que otras personas se enteren que estamos deprimidos. Debido a esto, mi primera recomendación es aceptar que no estamos bien y necesitamos ayuda porque, este problema no se soluciona solo o por cuenta propia. Aunado a ello, no debemos comprarnos la idea de que estamos deprimidos por ser personas débiles ya que, esta teoría está muy lejos de acercarse a la realidad y aunque no es una situación normal, realmente no estamos solos en esto y hay muchas personas dispuestas a ayudarnos para que nos liberemos de todas esas ideas y sentimientos que nos están lastimando.

  Haber padecido depresión y desarrollar pensamientos suicidas me enseñó que, a pesar de que la vida no es color de rosa en todo momento, un abrazo genuino y la compañía de alguien nos puede ayudar a amar nuevamente nuestra vida porque si de valor se habla, sin duda alguna la vida es lo más valioso que tenemos por ello, no permitamos que nada ni nadie nos apague y además de la ayuda especializada, vamos a apoyarnos en nuestros seres queridos.

  La depresión y el suicidio son temas muy tabú en nuestra sociedad y debido a ello, es poco lo que nos educamos respecto al tema. Sin embargo, para cambiar esta situación es indispensable impartir conocimientos adecuados respecto a estas acciones ya que, con una buena educación vamos a poder identificar a una persona que está exclamando un grito silencioso donde pide ayuda. De igual modo, conocer detalladamente el tema también nos puede ayudar a descifrar si los sentimientos que estamos experimentando son depresivos y necesitamos ayuda ya que, la vulnerabilidad generalmente no nos deja razonar adecuadamente.

  Durante la juventud, las emociones tienden a desarrollar mucha inestabilidad y, en gran medida esto se debe a un proceso hormonal que exploramos por lo tanto, en esta etapa es clave la observación, empatía y comunicación ya que, de ello se puede conocer cómo están los sentimientos del joven.

¡Muchas gracias por leer mi publicación!