Hola, @lisfabian. Muy oportuna reflexión para los tiempos actuales.

Bien sea que se le diga culpa, responsabilidad o problema, la persona que hace daño rara vez reconoce sus faltas. Siempre se enfrascan en un juego de ping-pong porque no pueden con el sentido de culpabilidad.

Lo que no saben es que gracias a reconocer y rectificar nuestros malos actos, es que podemos evolucionar a una mejor calidad de vida.