Iniciamos la mañana desde muy temprano a las 5:30, me levanté, y como todos los días, doy gracias a Dios porque aún respiro y por tener salud cada día, mi esposo ya estaba levantando a la princesa para prepararla y llevarla al colegio. Me dirigí al baño para hacer lo de costumbre, el aseo personal y recoger mi cabello cuál guerrera del día, pase a la cocina y prepare un rico pan con queso, salsa rosada y jamón para el desayuno de la escuela de la consentida de la casa, acompañado de su termo de agua y jugo de papelón con limón y a su ves le prepare una rebanada de pan con mayonesa y café con leche para comerlo antes de irse a clases.

Con todo listo, mi esposo lleva a Valentina a su escuela, yo quedo en casa atendiendo el hogar mientras lo espero, tomé mi droga favorita para comenzar con buen pie el día (una taza de café), y luego fui a mi cuarto a tender las camas y acomodar lo más que puedo (como todos los días), barrí y limpie el piso.

Ya para las ocho de la mañana, y con mi esposo en casa, decido hacer un desayuno rico, prepare un sándwich de mayonesa con queso y jamón para mí esposo y para mi, una rica arepa frita con mantequilla, jamón y queso fundido.

Luego del desayuno comenzó la jornada en el hogar: recoger, lavar, limpiar, etc., y al mismo tiempo, picaba poco a poco los alimentos que utilizaría para el almuerzo. Mi hija tenía días pidiéndome que le hiciera una tortilla que es su debilidad, y justo ayer le prometí que le haría una para el día de hoy, y fue así, sueño cumplido!. Pique en cuadros pequeños las papas, la cebolla y pimentón, cociné las papas y luego coloque todo en un bol para agregarle los huevos y la sal, integré todos los alimentos para luego hacer las amadas tortillas.

Realmente fue muy satisfactorio ver a mi hija disfrutarse un plato que le encanta, me gustó complacerla.

Terminamos nuestro almuerzo y como siempre esperamos unos cuantos minutitos para reposar la comida, y al cabo de 20minutos, convide a mi pequeña a tomarnos una ducha, pues debía hacer diligencias con mi madre y también hacer mercado para el hogar. Salimos y nos dirigimos al centro de la ciudad, debíamos comprar unas telas para realizar un trabajo, luego nos fuimos al automercado. Llegamos al Hato Grill de Cumaná, un lugar en donde encuentras una variedad de productos nacionales e importados, tomé mi carrito y fui colocando todo lo que me hacía falta.