🔷🔸One day and nine minutes in a window🔸🔷🔸Un día y nueve minutos en una ventana🔸🔷[EN][ES]
English
—Hey Charles! Good Morning. — Olivia says cheerfully as she leans out the window.
—Oh, hi Olivia, how are you? — Charles replied.
—I can’t complain. Taking advantage of the fact that they finally open the window here, they are doing it more often. —Olivia said taking a deep breath.
—Yes, I have realized that. Weird stuffs has happened lately. —With intrigue Charles answers.
—What do you mean, Charles? I’ve noticed Victor is acting strange.
—I don't see many people walking down the street, not as often as before. Also, Isabella spends her time at the house all day long. I see that she is eating a lot too, the only one who has the right to eat whatever I want is me. However, she is giving me less food every day.
—But Charles, you're a little heavy, don't you think? You should start losing a some weight, maybe that's what Isabella wants. —Olivia says jokingly.
—I would love that isabella plays with me as they do with you, so maybe with that exercise I would lose some weight, but life is tough. Not everyone wants to spend time on that, instead they live outside. As if they didn't realize how comfortable it is to be at home.
—But Diana is always out, she only comes back at night to eat and I don't see you complain about it, rather, you love to talk with her.
—Jealous? —Charles answered Olivia sarcastically. —Easy sweetie, I also love to talk with you for the few moments you come out to delight your eyes with the view.
—What are you talking about, Charles? —Olivia replied with some nervousness. — Of course I'm not jealous, besides, I have my own crush, I see him in the box that Victor sees all day long.
—Is Victor also in the house all day long like Isabella? — Charles asked. — Hmm, that’s weird. I wonder what happens so that now, why do they spend all the day inside... wait, crush? in a box? — Charles said realizing what Olivia had said. —Don't tell me that you like the cat that comes out eating that disgusting dry food they give me everyday, I don't understand what the cat is enjoying so much in this food, is kind of disgusting.
—Eating that paté all the time is going to make you to roll down the hill Charles.
—Lili! Time to eat. — Exclaimed a strong, manly voice inside Olivia’s house.
—My name is Olivia! Jesus. —She exclaimed. —These humans with their degrading names. We will talk later Charles.
—Yeah, Yeah... see you around sweetie. These cats today... Dear lord, how time has passed! It is 7 p.m., I’ll better annoy Isabella, see if she gives me some attention.. or food.
Español
—Buen día Carlos. —Dice Oriana alegremente al asomarse por la ventana.
—¿Cómo estás Oriana? —Respondió Carlos.
—No me puedo quejar; aprovechando que al fin abren la ventana, lo están haciendo más a menudo. —Dijo Oriana respirando profundamente.
—Sí, me he dado cuenta de eso. Han pasado cosas extrañas últimamente. —Con intriga responde Carlos.
—¿A qué te refieres Carlos? he notado a Víctor un tanto extraño.
—No veo a mucha gente caminando por la calle, no tan a menudo como antes. Además, Irma se la pasa en la casa todo el tiempo; sumado a eso, veo que está comiendo mucho, aquí el único que tiene derecho a comer lo que se me venga en gana soy yo. Sin embargo, me está dando menos comida cada día.
—Pero Carlos tú estás algo subidito de peso, ¿no crees?, deberías aprovechar de perder algunos kilos, a lo mejor es lo que quiere Irma. —Dice Oriana de forma jocosa.
—A mí me encantaría que jugaran conmigo como hacen contigo, así tal vez con ese ejercicio bajaría de peso, pero la vida es cruel. No todos desean invertir tiempo en eso, a cambio viven afuera. Con lo cómodo que es la casa, ¿eh?
—Pero Diana vive afuera todo el tiempo, solo regresa en la noche para comer y no veo que le digas algo al respecto, más bien, te encanta charlar con ella.
—¿Celos? —Respondió Carlos a Oriana con tono sarcástico. —Tranquila querida que a mí también me encanta charlar contigo los pocos ratos que sales a deleitar de la vista.
—¿Que estas hablando Carlos? —Respondió Oriana con algo de nervios. — Claro que no tengo celos, además, tengo a mi amorcito que veo desde la caja que Víctor ve todo el día.
—¿Víctor también está en la casa todo el día como Irma?—Preguntó Carlos. — Hmm, extraño. Me pregunto qué ocurre para que ahora se la pasan todo el día encerrados..., espera, ¿amorcito en una caja? —Dijo Carlos al darse cuenta de lo que había dicho Oriana. —No me digas que te gusta el gato que sale comiendo la comida seca asquerosa que me dan todo el dia, no entiendo qué le ve ese gato a la comida para que se la coma como si fuera un manjar.
—Por andar comiendo paté es que andas así de gordo Carlos.
—¡Lili! A comer. —Exclamó una voz fuerte y varonil dentro de la casa de Oriana.
—¡Que me llamo Oriana! —Exclamó. —Estos humanos de hoy en día con sus nombres denigrantes. Hablamos luego Carlos.
—Sí, sí.. nos vemos. Estas gatas de hoy en día.., ¡Vale pero cómo ha pasado el tiempo! son las 7 de la noche, mejor voy a fastidiar a Irma, a ver si me da algo de atención..
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