Esta voz.

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Tierra oculta. miradas de espaldas, voces inclemente nadie escucha el eco, de nuestra tierra santa.

Todos de espalda, habitantes perdidos en un mundo externo, a nadie le importa, cada quien en lo suyo.
El planeta clama, un corazón partido, sangre corren por sus ríos, su muerte está cerca y nadie reclama.

Una herida sangrando por trincheras y trampas, hombres de oración les pido, miren con cerca la calma para que viva el planeta y no muera de rabia.

Pueblos pobres de ignorancia, no saben que es amar, mucho menos cuidar la tierra que les da sonten para colocar sus pies.

Atended y escucha latidos de corazón, se escucha mucho quebranto en esta tierra bendita que existe solo para nosotros.
Animales clamando, ya no saben qué hacer, porque el hombre está cerca de destruir su llamada tierra.
Pasan grandes torbellinos y el hombre solo se queja, sin darse cuenta claro que la culpa está en sus manos pronto morirá el planeta y nadie mira culpables.

Ya no existen vendajes, ni trapitos para curar las grandes heridas que tiene nuestro planeta en sus suelos.

Recoge pronto tus hilos que todavía estamos a tiempo naciones , hombres de mundo recoge todos el viento escucha el clamor del cielo, debes cuidar tu planeta.