Amaneció como todos los días, agradeciendo un día más, el cielo azulito especial como a mí me gusta. O los días se van volando o yo estoy atrasada, creo que lo primero. El tiempo va más deprisa que lo normal, en fin, me levanté como siempre agradeciendo la vida y pensando en mi cafecito, me fuí directo a la cocina y lo preparé. Más atrás vino mi hijo y nos pusimos a hacer el desayuno.

Parece tan rutinaria la vida pero, somos seres de costumbre y mejor que es así porque sino, ya hubiéramos colapsado con la situación.

Desayunamos y luego de asear la cocina, cada quien a lo suyo. Me puse a limpiar un poco la sala para que no se acumule el sucio. La última vez fué muy tedioso limpiar intensivamente, prefiero ir de poco a poco.

El tiempo se fué volando también. Iba a salir a comprar cosas pero se hizo muy tarde y preferí dejarlo para mañana cuando caigan otras recompensas y así tener más disponibilidad para la compra ya que todo está sumamente costoso.

Mi vecina del frente me pasó un mensaje para que agarrara agua. El agua llegó a la tubería (a mi casa no lamentablemente), la presión es muy baja y no logra llenarse mi tanque pues no tenemos bomba rápida para tal fin, mi vecina sí.

Ella es muy amable y buena persona y gracias a ella y a la lluvia, hemos podido sobrevivir a esta catástrofe de la escasez de agua. Mi hijo bajó y llenamos todo lo que pudimos, gracias a Dios y a la buena voluntad de la vecina, aún queda gente solidaria en el mundo y eso, es un valor importante de resaltar.

Hicimos almuerzo y mi hijo me dijo que quería descansar. El pobre tiene muchos días estudiando y llegó el sábado y me dijo que no quería hacer nada más.

El día estaba así como para descanso y yo también tenía algo de sueño, sin embargo, hice el café de la tarde y me fuí a escribir, revisar los diarios de mis compañeras, comentar algunos otros y dedicarme a otros escritos. Me llama la atención que los curadores están tardando algo en revisar las publicaciones, sin embargo, confío en su trabajo e imagino la falta de tiempo para abarcar tantas publicaciones. Esperaremos por ellos.

Me preparé unas cotufas para comer mientras estoy en la computadora pues, si me quedo muy tarde, me pega el hambre otra vez jajaja, mañas de uno, tú sabes, ya me vas conociendo.