Guerra por vacunas
Esta cartelera fue colocada hoy en la pared externa del colegio se mis hijos. Junto con ella estaban algunas de las maestras informando a los atribulados padres que mañana no habrá clases ya que se adhieren al paro convocado para el día de mañana.
Lo cierto es que desde el inicio de las clases presenciales, los maestros y su sindicato están presionando para suspender las clases debido al alto riesgo de contagio en las aulas. El gobierno les sigue reiterando que las clases presenciales no se suspenderán, por ahora.
Esta vez el reclamo es por la gran cantidad de personal docente y administrativo que no está vacunado. Como siempre, los grandes perdedores resultan ser los niños, que ya vienen de perder un año completo de clases.
Eso es producto de la mala gestión, tanto para conseguir vacunas como para respetar el orden de prioridades. Aun no han terminado de vacunar a los mayores de 80 años, que queda para los que siguen? El problema se presentó cuando decidieron abrir la vacunación de varios grupos diferentes sin tener en cuenta el arribo de las dosis necesarias. También hubo y hay muchos que por amiguismo, influencias o picardía se han salteado la fila.