Mi día comenzó a eso de las cinco y media, agradeciendo a Dios por la oportunidad de haberme dado otro día más de vida, me levanté y realice mi aseo personal y luego me dispuse a realizar el desayuno junto con el alimento de mi bebé para dejar todo listo para irme al trabajo.

Al llegar a la consulta me coloque mi equipo de bioseguridad; todo estuvo tranquilo, la coordinadora me llamo para planificar una jornada de vacunación contra el covid-19 y quedamos de acuerdo para el día 17 ya que en la comunidad que estoy queda un poco retirada y hay que cuadrar un transporte, y como a la una me retiré a casa.

Al llegar pase directamente a darme un baño y poder agarrar a mi bebé, que cuando me vio se puso contento jejeje, gracias a Dios mi esposo ya había preparado el almuerzo y llegué comiendo, le quedó muy bueno, y luego me fuí a descansar un rato tanto así que me quedé dormida junto con mi niño.

Dormimos dos horas, mi hijo se despertó con hambre y le di su alimento y luego nos sentamos un rato a pensar en que haremos con los gastos de comida y los del bebé, y que para la quincena todavía falta, bueno Dios proveerá eso fue lo que le dije a mi esposo.

Luego me dispuse a preparar la cena, me quedaba un poquito de harina de trigo y realicé unas domplinas, comimos y luego dormí al niño y me quedé dormida buscando señal.