Bogotá: entre el tumulto y la tranquilidad a las afueras
Hola parceros, feliz inicio de semana, espero que se encuentren todos muy bien. Me gustaría hoy hablarles de los contrastes en Bogotá, algo de lo que en otras oportunidades he hablado, y es que es particularmente destacable como en esta ciudad se alternan los espacios verdes con la ciudad en si, y me refiero a que hay muchos parques, mucha naturaleza en medio de todo el tumulto de edificios, gente y carros.
Aunque debo decir que no deja de ser algo contaminada, ruidosa en extremo, algo peligrosa incluso, pero sólo caemos en cuenta de ello en el momento que empezamos a andar en ella y que podemos salir y permanecer así sea un momento en otra localidad, fuera de la ciudad, y ahí es que decimos que, en efecto, la diferencia se siente.
Hace unos días comenté que había visitado una localida da unos 50 minutos de Bogotá, se llama Sibaté, y es que es un pueblo a decir verdad, pero con mucho movimiento de tráfico porque está en el camino hacia otras ciudades, así que es un pueblo de paso, con ciertas características de campo podría decir, hay sembraríos grandes, hay ganado en algunos sitios, en fin, es bastante tranquila.
Cuando estuve ahí por un par de horas, pude notar claramente que la tranquilidad resalta, quienes viven ahí prácticamente no lo notan sólo es su realidad, al igual que quienes vivimos en Bogotá (sobre todo si no salimos de la ciudad), nos quedamos sólo con la realidad del espacio donde vivimos, y ya, nos adaptamos, porque al final es lo que termina por ocurrir, pero si que es distinto.
Recuerdo cuando me mudé de la ciudad donde vivía en Venezuela, de Maracay, que es una ciudad central, hacia la ciudad de el Tigre, que es oriental, la diferencia fue clara, era mucho más pequeño, más tranquilo, todo quedaba relativamente cerca, la gente es diferente. Pues, lo mismo ocurre en este caso, la tranquilidad y el silencio, incluso la seguridad se siente, es un pueblo agradable, a decir verdad.
Pero el detalle es que cada espacio, cada ciudad tiene su particularidad, tiene sus beneficios, su desventajas, y es cuestión de adecuarse a cada cosa a ver como nos sentimos mejor, y para ello hay que darse el tiempo y la posibilidad de conocer otras realidades, porque es sencillo, no podemos optar por lo que no conocemos, tiene lógica, ¿no les parece?
Buenass buenass mi querido José 😘💜
Ciertamente se sienten las diferencias, a mi el Tigre no me gustó, yo soy más de ciudad, porque los pueblos me parecen muy pequeños y no hay a veces hacía donde ir o variar la rutina jejeje, pero esa es mi opinión personal. Pero no cabe duda que vivir rodeado de la naturaleza también tiene sus grandes ventajas para la salud sobretodo. Los espacios son más tranquilos y como bien dices algunas personas son diferentes, pero me sigo quedando con Bogotá jejeje.
Que tengas un bonito día, saludos!
Y además te sugerimos votar por @cotina como Witness, sino sabes cómo hacerlo, podrías revisar estas publicaciones:
https://steemit.com/hive-113376/@colombiaoriginal/colombia-original-apoyando-a-cotina-como-witness.