Les cuento que mi esposo y yo estuvimos trabajando toda la mañana. Fuimos hasta la sede del Ministerio de Cultura y tuvimos varias reuniones. Al salir del trabajo, mi esposo me invitó a comer un heladito. El calor empieza a arreciar y vale la pena comerse un rico helado.

      Fuimos a un lugar mi bonito llamado "Caramhelados". Aun esta decorado con adornos del día de San Valentín.

      Estuvimos conversando un buen rato. Nos relajamos y nos divertimos. Hoy el día fue relativamente tranquilo entre el trabajo y la casa, así que el helado cayó muy bien.

      Por si fuera poco, mi amado @palabreador, me compró un deliciosa torta de chocolate para llevar a casa. La tengo guardada en la nevera para disfrutarla viendo la televisión.

      Fue un día agradable y otro momento feliz al lado de mi esposo.