Crónicas de un Recién padre en Venezuela

Aunque parezca irreal, las tormentas en mi ser apenas iniciaban, pues ese mismo día fue el ultimo "Te amo" de aquella persona quien amaba con todo mi ser y por si fuera poco, en la noche del 24/07, salgo a mi casa a darme un baño y descansar un rato, llevaba mas de 32 horas despierto y apenas podía sostenerme, en otra noche silenciosa libre de tormentas (excepto las mías), paso por la casa de algunos familiares para dar la gran noticia y solo encuentro a una prima sola gritando ayuda con mi tío tirado en el suelo en una habitación con un galón y una cama llenos los dos de liquido rojo muy viscoso que aun salía por todos sus orificios (oreja, nariz y boca) de forma espumosa, sin saber que hacer y sin recordar que sucedió después, una hora más tarde estaba nuevamente en el hospital, con la ropa llena de sangre y sufriendo una perdida, en el segundo nivel del mismo hospital esta mi hijo recibiendo su primer acto de soberanía atinencia por parte de su madre, así comenzaron mis días como padre que, gracias a mis padres que me han ayudado hasta el ultimo momento he podido sobrellevarlo en años llenos de aprendizajes, alegrías, tristezas pero en definitiva todos momentos únicos que, sin duda alguna he vivido y me han enseñado grandes cosas.

Said, con apenas varios meses de nacido sorprendentemente delante de la madre dijo sus tres primeras palabras, las cuales fueron "Papa, Te amo". Lo cual me lleno de mucha alegría y emoción. No se puede negar que ni su madre ni mi persona (con mucho dolor por dentro) estábamos preparados para ser padres; cometimos muchos errores y cada error cometido se convirtió en un aprendizaje, así fue creciendo Said en medio de grandes dificultades económicas que no me permitían darle una condición social, humana y económica de máximo nivel, esta ultima es una de las que en el hoy me quitan el sueño.

Mi persona aun con varios trabajos y estudiando el salario devengado no cubría todas las necesidades que el niño requería, muchas personas prejuiciaban la situación en que nos encontrábamos, decían de forma chocante y burlona "Para que se pusieron a tenerlo si no podrían con el, que inmaduros fueron"; quizá hubieran tenido razón, fue un gran error que en Venezuela se paga con creces, pero ya esta listo, ya esta hecho y no hay retorno, y es verdad los errores se pagan, pero me prometí a mi mismo (por Said, por mis padres, por mi y por todos aquellos que no creyeron que podría en sacarlo adelante) que le daría lo mejor; y no se imaginan la satisfacción que llegue a sentir cuando cada día aun en medio de dificultades mi hijo estaba bien, sano y no le faltaba la comida.

Se me exigía más de lo que podía dar y casi siempre cumplía gracias a Dios y al apoyo de dos familias (La de su madre y la mía) unidas por la sonrisa de un bebe. Sin embargo muy en el fondo estaba acabado, me sentía mal y veía mis metas cada día más lejos, aun habiendo aceptado que ya mi prioridad era otra, sufría en silencio el hecho de que a mi paso no había tiempo para realizar mis sueños.

Un día se me acerco una amiga en la universidad y me pregunto "¿Que tienes?, le conté todo lo que me pasaba y solo me respondió; ¡Por dios! ¿Que te pasa?, ¡Apenas tienes 20 años recién cumplidos", ¿Eres un hombre de retos no?, ¡Desahógate todo lo que quieras, pero que no dure por siempre, ahora eres la esperanza de aquel que llego al mundo sin pedirlo, lo que será esa criatura en el mundo dependerá de ti!. Esto genero un impacto en mí y cambio rotundamente mi perspectiva.

Ya con 4 años de edad es un niño feliz, muy hiperactivo, esta en el segundo nivel de educación inicial, practica baseball, le gusta cantar, bailar, la poesía y le encantan los animales. Aun en medio de toda dificultad y con mucho apoyo es un niño sano y no le falta nada. Aquí les dejo algunas fotografías para que lo conozcan.