Miércoles 26 de Enero: Un día común de esta vida nómade

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_{Este mar es hermoso.}

Hola amigos! Espero que estén teniendo un lindo día. Ya sabrán en donde estoy, los que me vienen leyendo.

Hoy comparto un día común de voluntaria en esta hermosa ciudad. Aunque en realidad, lo que compartiré, es un día libre.

Si hay algo de espectacular que tiene este voluntariado, es que si bien la comida no está incluida, tenemos muchos días libres, por lo que estoy aprovechando para conocer la ciudad.

Ya tengo algunos lugares preferidos, entonces muchas veces pienso en ir a un espacio nuevo, pero me entran ganas de visitar aquello que se empieza a hacer familiar, y termino eligiendo lo que ya conozco y que me hace sentir súper cómoda.

Igual, al tener vrios días disponibles, digamos que me estoy dando el lujo de hacer esto. Si solo tuviera 1 o 2 días por semana para conocer, ya estaría como loca planificando los nuevos paisajes a visitar.

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Mañana

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El miércoles me desperté temprano porque quería practicar Yoga, así que estuve 40 hermosos minutos en mi Yoga mat, conectándome conmigo.

Hice mi agradecimiento, medité un poco, y me fui directo a desayunar avena con leche y una tostada con dulce. Tenía hambre, jeje.

Después de eso estuve un ratito en la compu, intentando escribir, pero el día me llamaba a visitarlo, así que decidí salir del hostel para ir a ver el mar.

Cuando estaba caminando por la avenida que conduce al Corso de Italia, que bordea la costa, vi unas escaleras detrás del Arco de la Victoria y recordé que el primer día que caminé por ese arco pensé en que debía subir las escaleras para ver a dónde conducían.

_{Esto es parte del circuito fitness.}

_{Génova querida. Con nubes o con sol, es hermosa. A la distancia pueden ver el Arco de la Victoria.}

Como en su momento no lo había hecho porque tenía que volver al hostel a trabajar, decidí cambiar el rumbo, y en vez de al mar, terminé explorando aquel nuevo escenario.

Me quedé totalmente maravillada.

Primero, descubrí que las escaleras son parte de un circuito de trekking y running, y este es uno de 3 que hay en Génova, y segundo, quedé asombrada con la belleza de la ciudad vista desde arriba.

Muchas ciudades tienen lugares pagos pra contemplar tal paisaje, y seguro que Génova lo tiene también, pero descubrir esto y encima poder disfrutarlo de manera gratuita, fue perfecto.

Caminé un ratito por ahí y luego volví al hostel.

En el camino, me compré una focaccia con aceituna que me salió 2,50 euros. Es una comida típica de Génova y las porciones son gigantes. Sí, es pan, lo se. Me importó? No. No puedo decirle: - no, estoy en plan detox a Génova, jaja

Na... sí, si que puedo y lo he estado haciendo, pero esta semana debo reconocer que me la tomé libre de Detox, ya que me di algunos gustos y estoy satisfecha con ello. Sí, entre lo gustos entra la arepa del domingo, jaja.

_{Muy muy rica la focaccia!!}

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Tarde

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Me tiré un ratito a dormir la siesta y ni bien me desperté, preparé unos mates y me puse con la compu. Además, traté de editar algunos videos. Tengo varios grabados y no tuve el tiempo de editarlos antes.

En cuanto decidí que era momento de tomarme un descanso, retomé mi idea de la mañana de ver el mar. La verdad es que me lo pedía el alma, así que sin pensarlo demasiado, me paré y me fui.

La playa queda a 20 minutos caminando, lo cual para mi representa algo bastante divertido, ya que me encanta caminar. Pero claro, era tarde y la puesta del sol es casi todos los días a las 17:30 hs.

Me apuré para poder ver el mar de día, y por suerte lo logré.

Por algún motivo decidí irme antes de que el sol se escondiera tras la perfecta línea del horizonte, pero disfruté de unos hermosos minutos en las rocas.

Atardecer en Génova

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Noche

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Cuando llegué al hostel, Juliette, la otra voluntaria, estaba al borde de un colapso, ya que recién se enteraba de que tendría que hacer un 4to check in ese mismo día.

Sin embargo, logró calmarse tras tomar su segunda cerveza y fumar como su 5to cigarrillo.

Juliette es francesa, tiene 22 años, es de leo y ama la fiesta con todo su corazón. Todos los días se la puede ver caminando tranquilamente por los pasillos del hostel con una birra en una mano y el atado de cigarrillos en la otra. Me hace acordar a mi a su edad. Yo también fumaba, amaba la joda y tomaba bastante. No todos los días, pero bastante.

Nour, por otro lado, es la antítesis de Juliette. Tiene 23 años y e pasa el día en el hostel trabajando y estudiando. Es de la religión islámica y reza 5 veces por día. En sus días libres trabaja tanto como puede. Se levanta pasadas las 11 am y se va a dormir desdpués de las 3 am. No concibe cómo hay gente que invierte mal su tiempo en fiestas, ama cocinar (de hecho cocina muy rico!) y está leyendo el libro "El Secreto".

Me identifico con Juliette teniendo en cuenta mis viejas costumbres, y me identifico con Nour viéndome en la actualidad. Sin embargo, Nour es muy disciplinado, mucho más que yo. Lo observo con admiración y sé que tengo mucho que aprender de el.

Estoy muy feliz y agradecida por tener un ejemplo así en mi día a día.

Pues retomano con el miércoles, Juliette se quejaba, yo recién llegaba impregnada de sol de la tarde y Nour cocinaba. Sin decir nada, preparó la mesa con 3 platos y nos invitó a comer. El plato fue Tayín marroquí.

_{El perfecto plato preparado por Nour.}

_{Allí pueden ver un poco de Nour, en esta captura de pantalla de un video que hice.}