He estado un muy buen tiempo perdido de estos mares. Pero eso se acaba hoy. Me complace participar en este maravilloso concurso que realiza la comunidad
@VenezolanosSteem. Agradezco muchísimo a
@MarcyBetancourt y
@SolPerez por el trabajo que están relizando en la comunidad y todo el ezfuerzo que hacen para mantener vivo este espacio. Lugar que me ha motiva a volver a participar en la plataforma. Mil gracias.
Leyendo el post para este concurso (puedes leerlo aquí) recordé algunas versiones de las diferentes leyendas que hay en Venezuela, y que algunas se mencionan allí. Se me prendió el bombillo y decidí inventarme una leyenda. Recurrí un poco o mucho a la ficción tratando de crear una leyenda, de cierta manera, moderna, y al mismo tiempo expresar una idea que no he encontrado en ninguna leyenda. Espero lo disfruten, nos leemos.
Fuente
El Niño
Todos nos quedamos despiertos después de la llamada de mi hermana. Papá salió a ver que había sucedido, mamá se puso a hacer café y abuelo se sentó en la mecedora con su pipa. Y comenzó a mecerse tranquilamente cuando el aire de la noche se hacía cada vez más frío. El ambiente, que comenzaba a cambiar, erizó la piel de abuelo y avivo el recuerdo como el fuego. Hacía mucho tiempo que no se sentía tanto frío, dijo. La última vez fue la noche que desapareció Toñito. Papá no vayas a comenzar con tus historias, reclamó mamá. Hija, la historia es verdad y no creo que esto sea una coincidencia. De seguro es El niño. Y entonces el silencio devoró a la noche. Abuelo se siguió meciendo con tal tranquilidad mientras contaba la historia de El niño: No es una historia tan antigua como muchas, pero es verdadera. El papá del niño una noche llegó borracho a casa, lleno de ira, porque su esposa no le guardó la cena, comenzó a golpearla, el niño no se acobardó y se metió en medio de la pelea, y con la misma mandarria con que mató a su esposa, mató al niño. Los vecinos contaron que se escuchó como se cayeron los dientes del niño y de su madre, y como salpicaba la sangre en las paredes. Ellos vieron cuando él los metió en el carro. Fue entonces cuando José, el amigo del niño, recitó la maldición. Nunca nadie volvió a ver al padre. Contaba José que ese fue El niño que cobró su venganza como bien recitaba en su maldición. Algunos cuentan que simplemente se fue de la ciudad. Días después encontraron el carro cerca del río, en un antiguo cementerio de una familia que vivía allí. Estaba lleno de sangre y el padre muerto con la mandarria en mano, y sin los dientes. Lo dientes estaban regados por el carro. Al transcurrir las semanas, un señor en el cerro pan de azúcar, llegó borracho a casa, golpeó y violó a su esposa e hijas, dejó herido a su hijo mayor y huyó. Pensó que se había salvado, pero no. Igual sucedió con el viejo Toñito, después de años maltratando a su esposa, fue descubierto, la noche que estaba huyendo el ambiente se puso frío, el silencio reinó hasta que se comenzó a escuchar algo caer, como sonidos de dientes y de huesos crujir, romperse y pegar contra el suelo, se escuchó el encendido de un carro, un niño lo tomó de la mano, porque yo lo vi, y en un pestañeo, con el sonido de un carro acelerando, desapareció.
Papá llegó con mi hermana y mis sobrinos. Ni siquiera hizo falta preguntar por Andrés, su esposo. Solo hubo abrazos y unas cuentas lágrimas, y muy pocas palabras. Papá acompañó a abuelo con un cigarro y café. En un breve instante se escuchó un crujir de huesos y de dientes caer al piso, el encendido de un carro, se sintió al alguien en la puerta, por la ventana un resplandor de luces de freno, la aceleración, una tensión, el susto y silencio. Todos respiramos profundo y en silencio, poco a poco, fue cayendo el rocío y comenzando el alba.
Me encantó.
Bienvenido a la comunidad #venezolanossteem, la casa de los sueños posibles. Mucha suerte en el concurso.
Muchas gracias. Saludos
Querido, @spavan697, qué bueno verte de regreso y más en esta hermosa comunidad.
Gracias por participar :)
¡Saludos!
Amigo, qué bueno volver a leerte.
Recibe un abrazo de mi parte.
Demás está decirte ... excelente tu entrada.
Un texto muy bien logrado.
Saludos.
Un abrazo también para ti. Saludos