La época del carnaval era la mas esperada para muchos en el pueblo, pero principalmente para Luciano, quien ese día dejaba florecer su esencia, esa que el resto del año vivía oculta.

La noche de la gran fiesta siempre llegaba mas temprano del trabajo, entraba a la casa con su ceño fruncido, saludaba a Úrsula con su respectivo beso y también a los niños, jugaba un rato con ellos y luego merendaban, finalmente subía a la habitación para prepararse para el gran baile de carnaval.

Era el esposo ideal, trabajador, cariñoso, buen proveedor y un padre amoroso, el hombre que todas querían tener, por lo que Úrsula estaba felizmente orgullosa de Luciano.

^{Imagen tomada de la publicación de @solperez}

Esa noche Luciano siempre iba solo al Carnaval, a Úrsula no le gustaba el bullicio de la multitud, por lo que se quedaba en casa con los niños, y eso era ideal para Luciano, quien dedicaba casi dos horas para arreglarse con su glamoroso disfraz, eso permitía que ya Úrsula y los niños estuvieran dormidos y nunca lo veían salir ni llegar.

El disfraz de Luciano lo transformaba una vez al año en aquella persona atrapada en su ser, era el único día que podía ser él, o mas bien ella, porque esa era la noche en la que Luciana cobraba vida.

Nota: Inspirada en la vida de la artista.

Esta es mi participación en el concurso de la amiga @solperez, quien nos invita una vez más, a crear a partir de una gran obra de arte, anímate a participar, acá te dejo el enlace

Invito a los amigos @casv, @enrisanti y @norat23

Gracias por leerme, te deseo salud y bienestar; además de éxito en todos tus proyectos de vida.