BARQUISIMETO EN DOS TIEMPOS (Crónica de una ciudad de Venezuela) Parte 10

Hola mis apreciados Steemians, hoy estoy llegando al final de esta serie de 10 entregas sobre "BARQUISIMETO EN DOS TIEMPOS", y quiero hacerlo con una publicación especial, donde nos pasearemos brevemente por las décadas de los años 60 y 70, mencionando algunos sitios emblemáticos de esa época, hasta llegar al 2021, con una reflexión final de lo que es hoy día nuestra querida ciudad de los crepúsculos y las expectativas que mantenemos a futuro sus habitantes. Abordemos entonces la nave del tiempo y trasladémonos imaginariamente hacia esas dos décadas, vividas intensamente por los barquisimetanos.

Casa de Eustoquio Gómez, calle 25 con carrera 17
Foto tomada del portal: https://cosasyobjetosantiguos.blogspot.com/2013/08/fotosantiguasbarquisimeto.html

AÑOS DORADOS

Vista aerea del centro de Barquisimeto
Foto tomada del portal: https://cosasyobjetosantiguos.blogspot.com/2013/08/fotosantiguasbarquisimeto.html

Las décadas de los años 60 y 70 fueron vividas intensamente en el mundo, y Barquisimeto no fue la excepción, en esta ciudad en pleno desarrollo se sintieron los cambios progresivos en muchos sentidos, la moda, la música, el vestido, la forma de divertirse, en fin, era una población que se enfrentaba a una metamorfosis inducida por la transculturización, generada en gran medida por los medios de comunicación, que para ese entonces ya comenzaban a hacerse sentir de una manera importante en nuestro país.

DE CIUDAD TRANQUILA A METROPOLIS EFERVESCENTE

Foto de la Avenida 20 de Barquisimeto
Foto tomada del portal: https://cosasyobjetosantiguos.blogspot.com/2013/08/fotosantiguasbarquisimeto.html

Pasar de ser una ciudad tranquila a convertirse en una Metrópolis en efervescencia, activó en los barquisimetanos esas ganas incontrolables de experimentar cosas nuevas, es así como comienzan a aparecer en la ciudad, nuevos clubes, salas de cine, discotecas, Tascas y Restaurantes, entre otras atracciones, que representaban para los guaros una cartelera de opciones bastante tentadoras, mismas que estos aprovechaban al máximo, pues en esos tiempos los venezolanos contábamos con niveles de ingresos aceptables y la diversión era una opción más dentro del presupuesto familiar.

SITIOS DE GRATA RECORDACIÓN

Avenida Vargas entre carreras 21 y 22 Barquisimeto
Foto cortesía de: https://www.facebook.com/viejobarquisimeto/photos/a.373113169758741/1326734971063218/

En este mismo orden de ideas, pero ahora citando al reconocido Periodista Víctor Barranco en su artículo publicado el 14 de octubre de 2011, a raíz del aniversario número 468 de la fundación de Barquisimeto, titulado: “El Barquisimeto que viví y el que me contaron”: Crónica de una ciudad a sus 468 años de fundada, donde hace mención a algunos sitios que hoy son de grata recordación para los que tuvimos la suerte de conocerlos y visitarlos, aquí les dejo un segmento de esa estupenda selección: “El Tip Top en la 20 donde hoy es Casa Monasterios. La parrillita de a 2 Bolívares en la Vargas con la Venezuela junto a la arepa frita con mortadela y tomate a solo real y medio, y la que recordaba Jesús Cañizo en la 21 entre 21 y 22. La tostada del Terminal de la Vargas. La del Orquídea en la 45 detrás del Cementerio. Las areperas La California y la 25, donde solía acudir Renny Ottolina. Las de Patepalo. El carrito de la Panamericana con la 29 y sus famosas arepas de carne molida. El Bigote en el oeste de la ciudad. Los restaurantes de Pavia, donde el chivo sigue siendo el rey de los fogones. Mi Juguito en la 17 con la Avda. Vargas. Los famosos quioscos del Parque Ayacucho y su Lomo Prensao. Los Carpinteros en la Plaza La Mora. La Cabaña en la Avda. Vargas una de nuestras primeras marisquerías, cuyo dueño se suicidó en el propio local”. Esta es sin duda, una magistral selección de los sitios preferidos por la gente de esa época, con la cual quiero rendir tributo y homenaje a este recordado y excelente colega periodista ya fallecido, el Licenciado Víctor Barranco.
Espero que algunos de los que se tomen un tiempo para leer esta reseña, hayan podido visitar uno de estos establecimientos citados en el segmento anterior, y sientan la nostalgia que experimenté yo al recordar esos hermosos años en los que con poco dinero podías disfrutar y divertirte sanamente en cualquier ciudad o pueblo de Venezuela. El inexorable tic, tac del reloj, y la llamada picota del progreso, continuaron su marcha, sin dar tregua a la vida de esa ciudad, que se negaba a dejar atrás aquellas tranquilas noches de diversión sana y accesible para todos.

OSCURO ABISMO

Avenida Libertador a la altura de la Urbanización Patarata
Foto de mi autoría tomada con mi celular TCL

Pasaron los años en un abrir y cerrar de ojos y la tasa de natalidad se incrementó, multiplicando la población y presionando por ende el desarrollo y la expansión, con ellos también llegaron la inseguridad, el alto costo de la vida, los vicios y la corrupción en los organismos públicos. La Nación se sumió en una terrible depresión económica, lo que incrementó en gran medida la escases de productos y la especulación en todos los sentidos, dando paso a una incontrolable hiperinflación, que hoy nos tiene inmersos en un oscuro abismo social, político y económico.

REFLEXION FINAL

Avenida Libertador a la altura de la Urbanización Patarata
Foto de mi autoría tomada con mi celular TCL

Debo concluir manifestando que la Barquisimeto de hoy, a pesar de contar con grandes Centros Comerciales, Parques y Plazas, edificaciones modernas y una red vial aceptable, necesita de más inversión y cuidados, y no puedo por más que quiera, obviar esto, pues sería como querer tapar el sol con un dedo. Esta hermosa ciudad, que un día fue considerada como la más limpia del país, hoy presenta un rostro diferente, del cual no voy a hacer referencia para no caer en materia política, porque no es la idea de este relato. Pero a pesar de todas las vicisitudes y dificultades, el barquisimetano sigue siendo una persona hospitalaria y jocosa, y aunque ahora nos agobia una pandemia con la que no contábamos, seguimos haciéndole frente a la vida y sus aprietos, tratando de sobrevivir, enlazados a nuestras costumbres y tradiciones, esperando que se haga realidad aquel dicho, extraído del refranero popular venezolano: “Después de la tempestad, viene la calma.”, y esa calma es la que seguimos añorando con ansias los habitantes de la bien llamada “Capital Musical de Venezuela”, para volver a ver a Barquisimeto como la ciudad limpia, ordenada, alegre y divertida que nosotros conocimos y disfrutamos.

Mil gracias por acompañarme en esta serie de 10 capítulos conociendo el pasado y el presente de Barquisimeto, la ciudad de los crepúsculos, y una de las más importantes de mi Venezuela querida. Hasta la próxima…

Centro Comercial Sambil de Barquisimeto
Foto cortesía de Vicsay Melendez, tomada con un celular Samsung

Bibliografía consultada: Periódico Digital "NOTICIAS BARQUISIMETO"