Hola queridos lectores, esta es mi primera participación en el concurso de #fotocuento y estoy muy entusiasmada, espero mi trabajo sea de su interés y agrado.

Este post consiste en crear una historia comprendida con un máximo de 400 palabras, inspirada por una fotografía de la autoria de @rahesi organizadora del evento.

Si quieren participar en el concurso, este es el link

¡Un dia para no recordar!

No pude cerrar mis ojos, el tiempo parecía haberse detenido, en mi cabeza retumbaba pensamientos de temor e incertidumbre, recordaba el día tan ajetreado que había pasado preparando y adornando las grandes bancas de la Iglesia; observaba aquellos vitrales tan hermosos y grandes ventanales que caracterizaban la antigüedad de aquella estructura tan perfecta, donde una ves se unieron mis padres en matrimonio para formar una sola alianza.

Faltaban veinte minutos para las tres de la mañana, en mi profunda inquietud recordaba aquel momento fatal que marco mi vida profundamente. Federico, mi prometido, el hombre que elegí para formar mi familia, estaba en la habitación de huéspedes en casa de mis padres, con aquella persona que jamas hubiera imaginado, los mire y mis cuerdas vocales se petrificaron, se besaban y tocaban apasionadamente a dos días del acontecimiento mas importante de mi vida. ¡Enrique, era el mejor amigo de toda su vida!

Quede profundamente herida, impactada ante la mas vil deslealtad que le pueden perpetrar a un ser humano, sentí una oscuridad que tocaba mi alma, llenando mi vida de tristeza y desesperanza, en ese instante mi corazón murió. Sin importar los concejos dados por el párroco de la Iglesia: " perdonar y olvidar, la mejor decisión para poder ser feliz en este mundo". Solo pensaba, en el paso tan importante, que a escasas horas iba a dar con aquel hombre que creía conocer y ya no conocía.

Decidí caminar por los alrededores del pueblo y sin darme cuenta, estaba parada ante aquella estructura antigua, que reflejaba la majestuosa belleza del pasar de los años, imaginándome las historias guardadas bajo el techo de aquella Iglesia, donde parejas, unieron sus vidas y conquistaron sus diferencias en el tiempo, alcanzando la felicidad plena; evento que jamas podre conseguir yo, con Federico.

En mi mente solo se paseaba la idea de quitarme la vida y echar sobre ellos la culpa de tan nefasta decisión; en un abrir y cerrar de ojos, sin darme cuenta mis pies me llevaron hasta el balcón del campanario de aquella Iglesia, con lagrimas contemple el cielo obscuro y sombrío, unos segundos mire al vació con la convicción de que era la única opción, terminar definitivamente con tanto sufrimiento y dolor, mi corazón palpitaba tan fuerte que destrozaba mi pecho, obligándome respirar tan rápido hasta no sentir nada, mi cuerpo desfalleció y me deje caer...