Sistema de Banco Personal

Éste podría ser el primer paso a un nuevo mundo, que en complemento con el universo de las criptomonedas nos abre infinitas puertas a cada ser existente, para poder vivir un mundo libre, en donde cada uno es dueño de sus finanzas, y por consiguiente, sus sueños.

Empecemos...

En el mundo actual, la mayoría de las personas hacen básicamente dos cosas:

1. Invertir de manera automática
2. Ahorrar de manera deliberada

Lo que deseamos lograr es: ahorrar y guardar dinero de forma automática, de manera que cuando se nos presente la oportunidad, tengamos ese dinero extra bajo nuestra jurisdicción y podamos invertir.

Para lograr esto, lo primero que debemos lograr, es organizar nuestra vida personal financiera, puede sonar lógico, pero pocas personas realmente entienden sus gastos personales.

Clasifiquemos entonces nuestros gastos para entender nuestra situación financiera:

1. Gastos destructivos: Éste viene siendo el peor de los gastos, el que deberíamos tratar de identificar, y posteriormente eliminarlo completamente.

Ejemplos de gastos destructivos: Cuentas de servicios que realmente no estamos usando en su totalidad, inscripciones a entidades y que posteriormente no les estamos sacando todo el provecho, deudas con intereses excesivos y que simplemente seguimos pagando, consumos de productos que nos están haciendo daño tanto a la salud como a nuestro bolsillo, entre muchos otros gastos destructivos que existen en nuestras vidas en el día a día.

1. Gastos de costos de vida: Estos gastos tienen directa relación con la persona y con las cosas que la persona considera como gastos necesarios que agregan valor a su día a día.

Ejemplos de gastos de costos de vida: Viajar en primera categoría en avión, salir a comer varias veces a la semana a restaurantes, ir de vacaciones con toda la familia a los lugares mas lujosos, usar la última tecnología.

Éstos gastos son totalmente subjetivos de cada persona, y son los gastos que realmente nos motivan a vivir el día a día, pero llega un punto, que se podría convertir en un Gasto Destructivo, y es ahí en donde debemos tener 3 conceptos muy claros : PRECIO, COSTO y VALOR.

Precio: Es lo que nos costará la adquisición pagando con una divisa como el euro o dolar. Es decir, cuánto se reducirá nuestro bolsillo en relación al dinero, al momento de comprar o dar uso del producto o servicio que se desea adquirir.

Costo: Es un término más relacionado a la economía y a la salud personal. Imaginemos que deseamos mejorar nuestra salud alimenticia, es muy probable que llevar a cabo ese cambio nos costará un alto PRECIO, pero a largo plazo, podría ser un bajo COSTO, ya que, nuestra salud estará mucho mejor.

Valor: El termino valor muchas veces se deja de lado y es realmente el mas importante. Pongamos el siguiente ejemplo, imaginemos que somos dueños de una empresa, y deseamos aumentar las ventas de manera significativa, pero tampoco deseamos desembolsar mucho dinero para contratar al personal.
Lamentablemente, esa mentalidad , puede incluso disminuir las ventas de la empresa, ya que, si contratáramos a personal especializado en el área de ventas, que haya tenido por ejemplo una excelente trayectoria como vendedor, puede que nos vaya a costar un ALTO PRECIO, pero por otra parte será un BAJO COSTO y brindará un MUY ALTO VALOR.

Importante tener lo siguiente en consideración: Los gastos de costo de vida son totalmente necesarios, pero considerando que es uno con fines de entretención, felicidad, ocio, entre otros, es necesario que se pague con dinero directamente de tu bolsillo, y no solicitando algún tipo de préstamo, ya que de ser así, se podría convertir en un GASTO DESTRUCTIVO si no lo sabes lleva con disciplina.

1. Gastos de protección: Guarda relación con gastos de seguros de vida, seguros de automóviles, seguros de empresa, seguros de bienes, seguros de ahorros, entre otros.
   Éstos gastos son totalmente necesarios, y no se deben confundir con gastos destructivos, ni gastos de costo de vida.
   Imagínense que adquirimos un auto, y lo pagamos al contado, y además de eso decidimos no asegurarlo. En ese momento estaríamos realizando un gasto doblemente destructivo, ya que habremos sacado dinero directamente de nuestro bolsillo para adquirir el auto, y además si hubiera algún tipo de accidente o problema con el auto, perderíamos totalmente el bien comprado.

2. Gastos de producción: Estos son los gastos que debemos aumentar. Podrían ser por ejemplo, invertir en educación, invertir en una empresa que nos asegurará mas ingresos, invertir en un nuevo sistema que nos proporcione mayor flujo de efectivo mensual.

Para finalizar este primer paso, les dejaré algunas acciones a realizar a todos los lectores en sus vidas personales:

1. Reunir toda la información sobre bancos y estados de tarjetas de crédito y revisarlos, y ver la posibilidad de reducir ese gasto.
2. Escribir todos los gastos o desembolso de dinero. Si éste es un gasto recurrente, solo escribirlo una vez.
3. Clasificar cada gasto: Destructivo, Costo de Vida, Seguridad y Productividad.
4. Ver la posibilidad de reorganizar los gastos, de manera que queden bien clasificados.
5. Eliminar lo antes posible todos los gastos destructivos.

Realmente deseo que la información los ayude en sus vidas personales, y en caso que sea de su agrado seguiré compartiendo con ustedes todo lo que ha sido mi estudio sobre las finanzas durante los pocos años de vida que llevo, con la única finalidad de poder transmitirlo al resto del mundo y tratar de ser un aporte.

Hugo Knüst.