CONCIENCIA SOBRE EL SALTO ANGEL.

"Salto Ángel", la caída de agua más alta del mundo con más de mil metros de altitud, ubicado en el Parque Nacional Canaima, en Venezuela. Hoy sus defensores lanzan un llamado de auxilio, para que se frene la explotación minera y sin control que sufre el parque nacional, por parte de mineros inescrupulosos que actúan de manera ilegal en el territorio venezolano.
Desde hace muchos años, la actividad minera y la inclusión en territorio venezolano de los garimpeiros, que son como aves rapaces en busca de piedras preciosas, han causado y siguen haciendo un daño tremendo a esta belleza natural que se encuentra enclavada en el Macizo Guayanés. Esta zona del planeta posee un ecosistema único de cientos de especies de animales y una flora en la que destacan más de 500 especies de orquídeas, por tener un clima en la que la pluviometría juega un papel importante por la alta formación de nubes que descargan grandes cantidades de agua que alimentan uno de los ríos más grandes de Venezuela como es el Orinoco
El Estado Bolívar alberga el Parque Nacional Canaima que fue declarado por la Unesco, como Patrimonio de la Humanidad en 1994.
Con una superficie de 30.000 kilómetros cuartados y se despliega hasta la frontera con Guyana y Brasil. La etnia Pemón, desde hace tiempo atrás viene denunciando lo que hoy se considera un atentado contra la medio ambiente, por el daño irreparable que se le está haciendo a la naturaleza, con esas actividades que deforestan y acaban con un tesoro natural de oxígeno para el mundo, no sólo la minería, sino también algunas las personas destruyen lo que cuesta tanto recuperar.
Las Autoridades Venezolanas y el Ministerio de Turismo debe implementar medidas de carácter urgente, como más vigilancia en la zona, para frenar de manera inmediata estas actividades tan nefastas para el medio ambiente, esperamos que el llamado que hacen los Pemones y ambientalistas lleguen hasta los encargados de ser garantes de la seguridad del patrimonio natural de los venezolanos.