Me ha gustado mucho este post, @rafaelaquino.

Aprendí (mal) el ajedrez a los cinco años. Nunca volví a jugar después de esa edad. Mi hijo sí aprendió a jugarlo muy bien a los siete y llegó a competir en torneos contra otros colegios.

La verdad es que mi relación con el ajedrez hoy en día se define por la mala reputación que le da Dupin en "Los asesinatos en la calle Morgue" de Poe, el enjambre lógico-onírico que es el tablero de ajedrez en A través del espejo y lo que Alicia encontró allí de Carroll y mi frustración de no haberlo podido aprender mejor. Pero no me rindo; verás que cualquier día me lo propongo y lo logro.

Me constan los beneficios de este juego/disciplina en el desarrollo intelectual y social de los niños. Recomendado 100% al igual que este post ☻

Excelente. ¡Saludos!