Desintoxica tus influencias

Proverbios 25:26 TLA “Cuando el hombre bueno se rinde ante el malvado, se contamina como un río al que se arrojan desperdicios.”
El proverbista nos advierte que no debemos rendir nuestros valores, nuestros principios o nuestra fe ante los malvados porque ellos pueden ser una influencia tóxica para nuestras vidas. Y compara nuestra vida como un río y la mala influencia como desperdicios o basura. Cuando tú permites una influencia tóxica en tu vida, estás permitiendo que basura
contamine tu río. Recuerda: Hemos sido llamados a ser Agua Viva, no Agua Turbia. Es por eso que es tan importante identificar qué tipo de influencias estamos permitiendo en nuestra vida.
la pornografía es una de las influencias más tóxicas que podemos tener en nuestra vida.
La pornografía envenena tu mente.
La pornografía contamina tu corazón.
La pornografía intoxica tus sentimientos.
La pornografía destruye matrimonios, familias y relaciones.
Cada vez que consumes pornografía estás contaminando tu río con material tóxico.
TRES COSAS QUE DEBEMOS TENER EN CUENTA:

1. Un poco de veneno es suficiente para contaminar nuestra vida. 1 Corintios 5:6 “Es terrible que se jacten sobre dicho asunto. ¿No se dan cuenta de que ese pecado es como un poco de levadura que impregna toda la masa?”
   No se necesita un litro de veneno para contaminar tu vida, una solo gota de veneno es suficiente para contaminar, matar o destruir. Pablo nos da el ejemplo de que un poco de levadura es suficiente para impregnar en toda la masa de pan. Así también solo se necesita un poco de chisme, inmoralidad o pornografía para Así también solo se necesita un poco de chisme, inmoralidad o pornografía para impregnar, contaminar y envenenar tu vida. impregnar, contaminar y envenenar tu vida.
2. No porque todo el mundo hace, está bien.
   Romanos 12:2 Biblia Latinoamericana “No sigan la corriente del mundo en que vivimos, sino más bien transfórmense a partir de una renovación interior.”
   No porque todo el mundo escucha lo malo, está bien.
   No porque todo el mundo dice lo malo, está bien.
   No porque todo el mundo ve lo malo, está bien.
   No porque todo el mundo hace lo malo, esta bien.
   Debemos recordar que no hemos sido llamados a seguir la corriente sino a ir en contra la corriente. Dios nos ha llamado a crear una nueva corriente con valores y principios cristianos.
   Eso quiere decir que aunque todo el mundo diga mentiras, yo voy a decir la verdad. Eso quiere decir que aunque todo el mundo se dedique a murmurar de otros, yo voy a dedicar mi vida a alentar a otros. Eso quiere decir que aunque todo el mundo viva en inmoralidad, yo me voy a guardar y voy a vivir en pureza sexual.
3. No porque puedo, lo debo hacer. 1 Corintios 10:23 RV 2015 “Todo me es lícito, pero no todo conviene. Todo me es lícito, pero no todo edifica.”
   Uno de los grandes regalos que Dios le ha dado al ser humano es la libertad para decidir. Y hay cosas que puedo hacer y no voy a perder la salvación pero sí puedo perder la paz, la alegría o la salud. Hay ciertas cosas que no te van a mandar al infierno, pero te pueden enviar antes de tiempo al cielo.
   Es lícito escuchar música, sí, pero no toda la música te conviene.
   Es lícito ver películas, sí, pero no todas las películas te edifican.
   1 Tesalonicenses 5:19-22 NVI “No apaguen el Espíritu, no desprecien las profecías, sométanlo todo a prueba, aférrense a lo bueno, eviten toda clase de mal.”
   Debemos tener la madurez para evaluar si algo es bueno o no, si algo me edifica o no y si algo me conviene en mi vida cristiana o no.
   No porque me invitan algo debo decir sí.
   No porque me ofrecen algo debo decir sí.
   No porque me regalan algo debo decir sí.
   Digamos no a las influencias negativas y sí a Dios.