Hace casi un año que entré a la mención de Cine de la Escuela de Artes de la Universidad Central de Venezuela, y es exactamente el mismo tiempo que llevo interesándome e intentando la fotografía documental. Es imposible no recordar mi primera clase, con el siempre ocurrente Arquitecto y Profesor Rafael Marziano, y sus tan certeras palabras: "El cine es una de las cosas más difíciles que existe. Así que procuren no criticar la obra de los demás". Nunca estas palabras tuvieron tanta razón. Es por ello que cada vez que intento hacer crítica y análisis de cine no es, -como muchos "cinefilos" pretenden- degollar la obra. Aunque, claro está, no siempre nos va a agradar el guion, la fotografía o actuación de algún filme.

Con la realización de los cortometrajes de ficción y documental, he reafirmado mis ganas de seguir haciendo documental y fotografía fija (Aunque los conocimientos adquiridos en el diplomado de la ENC, me han hecho amar la dirección de fotografía). En fin, con el miedo de sacar la cámara y de que te la arranquen de las manos, miles de personas han evitado explotar este tipo de fotografía que, por lo general, no suele ser admirado por muchos. No obstante, sigo reafirmando lo difícil que es el documental y de cómo, por muy mala que sea la cámara que usas para tomar fotos o tus conocimientos, la fotografía logra algo en quien la ve. Con la aprobación de la Tesis en Realización Fotográfica, (Tesis en la que estoy trabajando) muchos han manifestado su postura de no querer graduar a estudiantes con fotografías (Incluso yo lo dije en algún momento): "tomadas desde la ventana de un apartamento o un carro". Por el contrario, -y no digo que sea mentira- se han hecho excelentes fotografías desde un carro o una casa y han sido capaces de demostrar y conmover aquella realidad que vemos, y que hacemos de vista gorda hasta que lo vemos en una fotografía.

Por otro lado, mientras más salgo a la calle a documentar, más he perdido el miedo a sacar la cámara y no, no digo que lleve un buen registro fotográfico o que realmente mis fotos reflejen la realidad porque, como bien dijo Bazin: "La realidad está ahí y no significada nada hasta que yo le de un sentido". O como lo mencionaría el Profesor Rafael Marziano, cuando habla del "Síndrome del apartamento de los Palos Grandes", cada vez que nos dejamos llevar únicamente por nuestro entorno pretendiendo que nuestro mundo es la verdad. Pero... Mea Culpa! también me he dejado levar por este síndrome.

Sin embargo, y debido a la crisis que hemos estado padeciendo, he sentido un profundo interés por aquellas personas que, deciden vivir en la calle, y es imposible no preguntarme el porqué decidieron estar dónde están ¿Acaso todo tiene que ver con la situación país, o hay algo más?